Un plan integral participativo, el proyecto ya en marcha Tenerife Cuida que desarrolla Cruz Roja, la asistencia domiciliaria en zonas rurales y una Oficina en el Intercambiador de Transportes de Santa Cruz cuyo coste asciende a 300.000 euros. Son las grandes líneas de actuación del Área de Acción Social respecto a los 148.532 personas mayores de 65 años que residen en la Isla.

La consejera del Cabildo y presidenta del IASS, Marián Franquet, destaca el objetivo de “enfocar las políticas de mayores hacia los derechos y no al asistencialismo, en marcha hacia un modelo centrado en las personas y con una coordinación institucional”. Combatir el aislamiento, atender necesidades y propiciar la plena participación social son pasos para el objetivo final: una estrategia integral de actuación para que puedan afrontar con calidad de vida su proceso de envejecimiento.

El punto de partida es el diagnóstico encargado por el Cabildo a la Universidad de La Laguna para conocer la realidad de la población mayor de 65 años en la isla. El global se distribuye por sexos en 83.716 mujeres, el 56%, y 65.456 hombres, el 44%. Pero en los mayores de 85 la proporción es justamente a la inversa. Entre las conclusiones del estudio cabe destacar que se trata de una población muy heterogénea y diversa, y que, en contra de lo que podía pensarse, es más autónoma que dependiente. Además se hace imprescindible su participación en la toma de decisiones. Para conseguir esto último se pondrá en marcha un plan integral participativo con un eje: la oficina que servirá como un nodo en el Intercambiador para conocer las inquietudes de los mayores y organizar actividades destinadas a ellos. Las obras comenzarán en breve en uno de los locales sin uso que tiene el Cabildo en la terminal de guaguas.

El trabajo de la ULL revela que la tasa de vejez de la Isla es de un 16% de media y la distribución por municipios muy desigual, con un 24,7% en Los Silos, por ejemplo, y un 10,1% en Adeje.

La presidenta provincial de Cruz Roja, Mayte Pociello, presenta las principales características del programa Tenerife Cuida, que la entidad y el Cabildo han puesto en marcha desde enero con el objetivo de combatir la brecha digital entre las personas mayores, prepararlas para un posible aislamiento y mejorar su conectividad. Pretenden llegar a 430 personas con el trabajo de 58 voluntarios.

Además del servicio a domicilio en zonas aisladas, en licitación y dotado con 1,5 millones de euros, la otra acción para los mayores es un proceso participativo pionero. El consejero Nauzet Gugliotta detalla sus diez fundamentos, los 200.000 euros de presupuesto con que cuenta y unas conclusiones que saldrán de cien talleres a desarrollar por toda la Isla.