Una narcolacha de 11 metros de eslora y cuatro motores de 75 cv cada uno fue interceptada a la deriva el pasado sábado por una embarcación de Salvamento Marítimo después de que un buque diera la alerta al visualizarla a nueve millas al noroeste de La Isleta. Las primeras indagaciones sobre la procedencia de esta embarcación semirrígida, la primera de este tipo que se localiza cerca del Archipiélago, apuntan a que podría pertenecer a las mafias del norte de Marruecos, que la utilizan para introducir la droga en la Península a través del Estrecho de Gibraltar. A este hallazgo se une el de dos fardos de hachís que durante la jornada de ayer fueron arrastrados por la marea hasta la playa de Las Canteras y la del Agujero, en Gáldar.

La localización de la goma, como se denomina en el argot policial a este tipo de embarcaciones, se produjo sobre las tres de la tarde del pasado sábado cuando un barco dio aviso a Salvamento Marítimo de que había avistado una lancha a la deriva y con una vía de agua al noroeste de la capital grancanaria. Al lugar se desplazó la Salvamar Nunki, que se encargó de transportarla hasta el Muelle Deportivo de Las Palmas de Gran Canaria donde se encuentra atracada. Tras su hallazgo, componentes de Vigilancia Aduanera y agentes de la Guardia Civil han acudido a inspeccionarla para tratar de determinar su procedencia.

Las fuentes consultadas descartan que este sea un nuevo método de los narcotraficantes para introducir droga en el Archipiélago, toda vez que las operaciones policiales que se han desarrollado en el Estrecho de Gibraltar ha provocado una disminución de la entrada de la droga a través de este modus operandi. Esta teoría se basa en que estas narcolanchas son utilizadas para trayectos cortos debido a su alto consumo de combustible, y que para trayectos entre África y el Archipiélago sería prácticamente inviable.

Otro de los indicios que avalan esta opción son los restos que la semirrígida tenía incrustados en la parte baja, entre ellos percebes, que apuntarían a que llevaría ya varias semanas en alta mar hasta que el pasado sábado fue localizado. Así, las mismas fuentes reseñaron que, probablemente, llegó arrastrada por las corrientes desde el norte de África y que fue utilizada para el traslado de sustancias estupefacientes.

Asimismo, indicaron que la goma tendría un coste aproximado de unos 300.000 euros, sobre todo porque tiene cuatro motores Yamaha de 300 cv que le proporcionan potencia para alcanzar velocidades superiores a los 100 kilómetros por hora.

El hallazgo de esta embarcación se produjo dos días antes de que ayer se localizaran dos fardos de hachís en la costa de Gran Canaria arrastrados por el fuerte temporal que azota al Archipiélago. El primero de ellos se produjo en Las Canteras a primera hora de la mañana cuando una bañista que paseaba por la arena vio un paquete en la playa, el tercero que se intercepta en menos de dos semanas. La Policía Nacional lo interceptó. Por la tarde, la Guardia Civil se intervino de otro paquete similar en la playa de El Agujero, en el municipio de Gáldar. Los dos fardos dieron un peso de 43 kilos cada uno, por lo que se sospecha que procedían de la misma embarcación al igual que los otros dos interceptados en días anteriores.