La Guardia Civil del Destacamento Marítimo de Fuerteventura ha denunciado a dos personas que practicaban este lunes, 11 de mayo, pesca recreativa en una embarcación en las proximidades de Puerto del Carmen, en Lanzarote, cuando esta actividad está prohibida por el Gobierno debido al estado de alarma.
Según ha informado la Guardia Civil en un comunicado este miércoles, las dos personas han sido denunciadas además por capturar pescado por debajo de la talla permitida.
La tripulación de la patrullera Canal Bocayna en la inspección a la embarcación comprobó que tenían 4,75 kilos de cabrillas y bocinegros, entre los que había piezas que no llegaba a la talla mínima.
La Guardia Civil, por todo ello, formalizó tres denuncias contra estas dos personas, una por tener pescado que no alcanzaba la talla mínima permitida y otras dos por la presunta comisión de la infracción de desobediencia a la autoridad sobre las condiciones en las que se puede realizar actividad física no profesional al aire libre.
Los dos denunciados antes de salir del puerto habían sido advertidos por personal de seguridad que no estaba permitida la pesca recreativa, refiere la nota, que indica que el pescado incautado fue entregado a una organización benéfica.
El Servicio Marítimo Provincial de Las Palmas ha potenciado la vigilancia en el litoral de las islas debido a que desde el día 11 de mayo la navegación de recreo está permitida en Canarias según la Orden TMA/400/2020, de 9 de mayo, pero no la pesca recreativa.
La nota recuerda también que la captura de pescado inferior a la talla autorizada es una infracción grave recogida en el artículo 70 de la Ley de Pesca de Canarias que prevé multas que oscilan desde los 301 a 60.000 euros.
