La grabación comienza con la víctima ya en el suelo. Un chico de treinta años abatido por los puñetazos que continúa recibiendo en la cabeza. Cuatro fuertes golpes que no ponen fin a la paliza. Uno de los dos agresores coge un patinete para dejarlo caer sobre la nuca del chico. Cada vez con más fuerza hasta que, al quinto golpe, los atacantes huyen con su botín. El móvil de la víctima. Ocurrió este fin de semana, de madrugada, en una calle de Hospitalet de Llobregat. Los vecinos de la zona aseguran que los robos y las peleas son diarias en el barrio y critican la falta de seguridad y presencia policial. En la agresión que tuvo lugar la noche del sábado pocos testigos pasaban por allí pero sorprende que, entre quienes lo hicieron, uno se limitó a mirar para atrás y continuar su camino. Otro siguió sentado indiferente a la agresión que se producía a su lado. Ninguno se paró a ayudar y el único que se detuvo se limitó a grabar con el móvil. Los agentes revisan ahora las cámaras de seguridad para intentar dar con los dos agresores.