La Guardia Civil ha detenido a dos personas a las que acusa de apropiarse de más de un millón de euros de una empresa láctea de Tenerife de la que una de ellas era administradora, quien supuestamente desviaba dinero hacia una cuenta particular.

Los detenidos son un hombre de 50 años y su pareja de 42, a los que se acusa de delitos de estafa, falsedad documental y administración desleal, y se investiga a una tercera persona de 19 años, todos ellos vecinos de Santa Cruz de Tenerife.

La denominada "operación Demócrito" comenzó en marzo, a raíz de la denuncia de la empresa contra uno de sus administradores por irregularidades contables en el pago a proveedores, ha informado la Guardia Civil.

Los investigadores averiguaron que el administrador enviaba capturas de pantalla de pagos a realizar al apoderado de la empresa y, una vez que eran autorizados, desviaba el dinero a una cuenta de la que era titular.

También detectaron documentos de compras ficticias de vehículos que no existían y cuyos importes se ingresaban en la cuenta del administrador.

En total, fueron desviados 1,1 millones de euros a la cuenta del administrador, y desde ella los fondos se transferían a otras cuentas y se realizaban pagos de gastos corrientes.

En un registro domiciliario, la Guardia Civil intervino un vehículo adquirido poco tiempo antes, bolsos de marcas de lujo, electrodomésticos, equipos informáticos y material de obra destinado a la reforma de un chalet recientemente comprado.

La autoridad judicial del juzgado de instrucción de Güímar ha decretado la prisión preventiva de los presuntos implicados en la estafa