No son tan conocidas como las Perseidas, pero las Leónidas son otra de las lluvias de estrellas más relevantes de cuantas cruzan el cielo de Canarias. Su presencia en otoño evita que, a diferencia de las conocidas como Lágrimas de San Lorenzo, sean tan esperadas por la población en general.

Con la supuesta bajada de las temperaturas propias de esta estación, subir a la cumbre o buscar un lugar apartado durante la noche para observar la caída de las estrellas no resulta una tarea tan agradable como en verano. Sin embargo, en esta ocasión en la que el otoño no parece que termine de llegar a las Islas, en la noche de este jueves 17 de noviembre, una mirada al horizonte nocturno puede resultar una buena actividad.

Y es que es hoy cuando se espera el máximo de meteoros por hora de las Leónidas, una lluia de estrellas particular. Su rareza radica en que a pesar de que es visible en la Tierra anualmente, con unos 20 meteoros por hora, cada 33 años el planeta atraviesa una zona de Leónidas muy densa, lo que multiplica el número de estrellas observables.

Cantidad

Se ha registrado años en los que han sido visibles hasta 100.000 meteoros en todo el firmamento. En las Islas, las observaciones realizadas por astrónomos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) desde las cumbres de Tenerife arrojaron una frecuencia de estrellas fugaces de entre 5.000 y 10.000 por hora.

No será el caso de este 2022 puesto que habrá que esperar casi otros diez años para que el planeta vuelva a recibir esta tormenta de estrellas. A ello se suma la fase lunar: el satélite se encuentra en cuarto menguante, lo que no ayuda a la observación astronómica.

Si no hay suerte esta noche, el Universo dará otra oportunidad a Canarias el próximo diciembre. En apenas un mes, en torno al 14 de diciembre, es el momento en el que el cielo se vuelva a inundar de estrellas con la lluvia conocida como las Gemínidas.