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Evaluación de acceso a la Universidad: Preparando los exámenes en Santa Cruz de Tenerife

Arranca la EBAU de junio en Canarias: Nervios a flor de piel

Cerca de 5.000 jóvenes se examinarán en la convocatoria ordinaria de la EBAU | Los exámenes vuelven a ser presenciales pero se mantienen algunas medidas sanitarias

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Alumnos en la biblioteca del TEA Tenerife Espacio de las Artes que se preparan para la EBAU 2022 María Pisaca

Nervios a flor de piel. Esta podría ser la sensación mayoritaria con la que cerca de 5.000 estudiantes afrontan su futuro ante la Evaluación de Bachillerato para Acceso a la Universidad (EBAU) en la convocatoria de junio, en Santa Cruz de Tenerife, que comienza hoy. Muchos de ellos ocupaban ayer las mesas de la biblioteca del TEA con apuntes, esquemas y resúmenes de los contenidos vistos estos dos últimos años de Bachillerato. 

En solitario, con compañeros de clase o amigos de siempre, miles de estudiantes apuran las últimas horas de estudio: se preguntan y repreguntan; subrayan una y otra vez ingentes cantidades de apuntes sobre contenidos que les caerán en los exámenes que se celebran desde hoy, miércoles día 8 hasta el sábado 11 de junio, en diferentes sedes de las cuatro islas de la provincia. En Tenerife los exámenes tendrán lugar en el Campus de Guajara y Adeje, en el pabellón polideportivo Las Torres y el Centro de Participación Ciudadana).

Un año más, la EBAU permitirá a los estudiantes de Bachillerato demostrar sus conocimientos para hacerse así con una buena nota que les permita luego acceder a la carrera universitaria que deseen el próximo curso y comenzar así su formación superior.

Uno de esos jóvenes es Raúl Alonso, que sabe que permanecerá en Tenerife estudiando después de terminar la EBAU. Su deseo es matricularse en el grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (Cafid), –y de reciente creación en la ULL– porque ese es su sueño. «Yo nunca he tenido ilusión por sacar los exámenes. Ahora, por una vez, noto la presión porque quiero entrar como sea», sentencia Alonso quien lleva meses preparándose. 

María expósito tiene muy claro el grado que quiere cursar tras superar la EBAU. El sueño de la alumna es estudiar el grado de Física en inglés. Su plan B, es hacer Matemáticas. Y también tiene muy claro que desea estudiar fuera, en Madrid, en la Universidad Complutense. «Voy a estar en un colegio mayor, estudiar algo que me encanta. Reconozco que lo tengo muy idealizado». Expósito lleva estudiando semanas muy duro para lograr su meta. La joven reconoce que no está preocupada pero sí muy nerviosa: «Me despierto resolviendo problemas».

El alumnado que apruebe podrá pedir la preinscripción en el grado entre el 20 de junio y el 4 de julio

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Naiara Santana lleva unas asignaturas mejor que otras. Pero si hay una asignatura que la joven controla son las ciencias. «Cuando supere la EBAU quiero hacer el grado en Biología», confiesa la estudiante. Santana comenta que le ha dedicado muchas horas al estudio de esta prueba, pero sin embargo, lamenta que la preparación que hayan podido tener se haya resentido con la educación online durante la pandemia. «Nos ha beneficiado porque nos han inflado las notas. Pero a la vez nos ha perjudicado, porque nos han hecho la vida mucho más fácil y a la larga, nos va a perjudicar», refiere la preuniversitaria.

Más confiada y tranquila se presenta ante estos exámenes la joven Tayri Carabote. Tiene varias opciones en el horizonte a la hora de elegir carrera, como Filología inglesa, hispánica o Magisterio. Carabote se ha preparado algunas asignaturas durante estas tres últimas semanas y otras ni las ha mirado, pero confía en el trabajo que ha hecho durante el curso, según afirma. «No voy nerviosa por el examen, tan solo tengo miedo de perderme por el Campus de camino al examen». La estudiante tiene una actitud de vida que no duda en aplicar siempre: «Voy tranquila por ahora. Es la mejor filosofía. Tomarse las cosas con calma». 

Sin nervios, y con la intención de ir a ver cómo va la prueba se presenta Ubay Santos, quien muestra mucha confianza y aplomo ante la EBAU de hoy. Santos lleva una semana estudiando unos exámenes que decidirán si continua con su formación superior. «Voy a lo que surja, si no, siempre hay más opciones para salir por otro lado».

Cerca de 5.000 jóvenes como ellos se examinarán en la convocatoria ordinaria de la EBAU en Santa Cruz de Tenerife cuyos exámenes vuelven a ser de forma presencial pero manteniendo buena parte de las medidas sanitarias. Se mantiene, como en los últimos años, la supresión del llamamiento a las aulas de los alumnos para evitar así que se produzcan aglomeraciones en las puertas de las aulas. La comisión organizadora de la EBAU recomienda el uso de mascarillas durante la realización de las pruebas y apela a la responsabilidad tanto del alumnado como del profesorado y el personal de apoyo.

Nota de corte

Galatea Leandro, una joven güimarera, aspira a convertirse en historiadora del Arte y para ello, lleva 23 días preparando su acceso a la Universidad. «Voy tranquila porque mi carrera tiene poca nota de corte. Es una de las llamadas carreras en extinción, así que llevo menos presión que muchos de mis compañeros en ese sentido». 

A la hora de tener en cuenta la nota de corte, los estudiantes toman como referencia las calificaciones de los grados del año académico anterior y así se hace una idea de la media que deben obtener para acceder a la titulación en la que esperan matricularse. Históricamente la carrera con mayor nota de acceso y mayor demanda de la Universidad de La Laguna ha sido siempre el grado en Medicina. El pasado curso, para inscribirse en esta carrera, se requería obtener un 13,029 de calificación en la EBAU.

«La educación online nos ha hecho la vida más fácil y, a la larga, puede perjudicarnos», señala una alumna

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A este respecto, las cinco carreras más demandadas en la institución tinerfeña se corresponden a la rama de Ciencias de la Salud, ya que a Medicina le siguen Enfermería (en los tres centros en que se oferta) y Fisioterapia. 

Otro joven con la preocupación de encontrar a tiempo el aula para examinarse es Guillermo Silva, quien comenta que solo tienen 15 minutos entre los exámenes para ir de un aula a otra. «Nunca he estado en el Campus y me aterra llegar tarde. Estoy nervioso porque las colas de la autopista del norte hagan que llegue tarde al primer examen». Silva confía en que superará la prueba de acceso. Su futuro pasa por estudiar Ingeniería Informática, otra carrera dura, por lo que se ha estado preparando de forma intensa.

Sea como fuere, la mayoría de ellos aprobará la prueba y un futuro ilusionante se abrirá ante ellos.

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