El obispo de Canarias, José Mazuelos Pérez, tomó como medida cautelar apartar al sacerdote Francisco Báez Santana de sus funciones en la iglesia Nuestra Señora de las Nieves (Telde, Gran Canaria) y éste presentó su renuncia como párroco. En un comunicado, la Diócesis de Canarias explicó que se ha cerrado de esa manera la investigación previa sobre las declaraciones del sacerdote sobre el caso de las niñas de Tenerife y su madre. Báez presuntamente culpó del asesinato de las niñas Anna y Olivia a la madre de ambas, por haber roto la relación con Gimeno y tener una nueva pareja.

De esta manera, el decreto toma como primera medida cautelar apartar a Báez de su oficio de párroco del templo de Nuestra Señora de Las Nieves, en Lomo Magullo, y de encargado de los lugares de culto anejos, como son San Francisco de Asís, en Cazadores, y San José, en Las Breñas. Mientras, la segunda medida cautelar prevista por el referido Obispado consiste en la prohibición de participar públicamente en la Santísima Eucaristía y la tercera, la de no hacer, en su condición de sacerdote, manifestaciones y declaraciones en medios de comunicación o a través de redes sociales.

Todas estas medidas fueron notificadas formalmente en la jornada de ayer al sacerdote, quien, después de firmar la correspondiente acta por la que se daba por notificado, presentó por escrito al obispo su renuncia al oficio de párroco, la cual fue aceptada.

Finalmente, el Obispado de Canarias recordó que en estos momentos queda abierto un proceso judicial canónico a Fernando Báez Santana y, a la espera de que se proceda a nombrar un párroco o administrador parroquial, actuará para sustituirle en Lomo Magullo, Cazadores y Las Breñas el vicario episcopal de la zona sur de Gran Canaria, Antonio Juan López.