Después de un año de pandemia por la Covid-19, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de la mitad de la población sufre fatiga pandémica; estado de ánimo que se materializa en estrés, insomnio o depresión, y a su vez ha provocado un aumento en el número de personas afectadas por pérdidas leves de memoria.

La neuróloga de Quirónsalud Tenerife y Costa Adeje, la doctora Alessia Pepe, explica que cada vez es más común que los pacientes que acuden a su consulta le comenten que están sufriendo “lapsus” a los que no encuentran justificación, “dicen que en lo que tardan en llegar a la cocina a buscar algo, olvidan para qué habían ido allí o que tienen dificultad para recordar nombres, tanto de personas como de cosas”. “Este tipo de problemas de memoria empiezan a generarse entre los 45 y 55 años y es más frecuente entre las mujeres”, apunta la especialista, para luego añadir que estos despistes están casi siempre relacionados con una mayor dificultad para focalizar la atención.

“Muchas personas creen que estos olvidos pueden deberse a que están empezando a presentar síntomas de la enfermedad de Alzheimer, pero muchas veces esto no es así, pues esta patología está relacionada con otro tipo de deficiencias cognitivas y no sólo con la pérdida de memoria; cuestión que se debe dirimir en la consulta del especialista”, añade.

La doctora Alessia Pepe señala que las causas de estos despistes están relacionadas con situaciones de ansiedad, estrés o emociones intensas.