Algunas escuelas infantiles privadas de Tenerife, sobre todo aquellas de menor tamaño, ven peligrar su continuidad a partir del mes de enero si no reciben las ayudas directas para gastos corrientes prometidas por la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias el pasado mes de junio. Muchas de las escuelas infantiles se encuentran en la actualidad al 60% de su capacidad y las más pequeñas cuentan únicamente con tres alumnos para poder mantener las medidas de seguridad sanitaria. Pero todas ellas contaban con estas subvenciones que se encargarían de cubrir los gastos de mantenimiento con los que contaron durante los meses de inactividad durante el confinamiento decretado en el primer estado de alarma sanitaria. Seis meses después, aunque la Consejería ya ha convocado estas ayudas, se están produciendo importantes retrasos debido al requerimiento de numerosos documentos y, mientras tanto, la situación de algunos centros es crítica.
La presidenta de la Asociación de Centros Infantiles de Tenerife (Acinte), Marina Amador, recuerda que el compromiso del consejero de Educación en funciones, José Antonio Valbuena, fue que este dinero estaría disponible alrededor del mes de agosto pero aun hoy el Gobierno de Canarias continúa reclamando documentos a los centros infantiles para poder conceder las ayudas. “Se está retrasando todo tanto que nos estamos viendo en una situación peliaguda”, afirma Amador quien explica que, a pesar de la voluntad de los trabajadores de la Consejería, “la burocracia nos está causando grandes problemas”. Acinte calcula que estas ayudas podrían ascender a unos 11.000 euros por centro, “lo que supondría un desahogo muy importante para muchas empresas”, sentencia la presidenta de la asociación tinerfeña.
Los trabajadores de los centros también se encargan de presentar las ayudas a la escolarización
Sin embargo, la Consejería de Educación ha anunciado que ampliará el plazo de justificación de las subvenciones para las escuelas de Educación Infantil municipales para contribuir a sufragar parte de sus gastos corrientes en el año 2020. De este modo, Acinte reclama que, si se ha podido ampliar el plazo para estas, también debería concederse una extensión para las escuelas infantiles privadas.
Al retraso en la llegada de estas ayudas se suma además el corto plazo de presentación que la Consejería de Educación ha concedido para las subvenciones directas de ayuda a las familias para el fomento de la escolarización temprana del alumnado de entre 0 y 3 años. Se trata de ayudas que corresponden a los meses de febrero, primeros 15 días de marzo, julio, septiembre, octubre y noviembre de este año y cuyo plazo de presentación finalizará mañana. Sin embargo, Acinte lamenta que se hayan convocado con tan poco tiempo puesto que fueron anunciadas el pasado miércoles.
Y es que la documentación que se requiere para optar a estas ayudas ha de ser recopilada por las familias pero son las escuelas infantiles las que la presentan en la sede electrónica de la Consejería. Así Marina Amador sostiene que no es tiempo suficiente para poder recopilar todos los documentos solicitados y que los trabajadores de las escuelas tengan tiempo de realizar los trámites, que además han de compaginarse con las tareas habituales de las escuelas.
Además del corto plazo de presentación, Acinte recuerda que tanto familias como escuelas conocieron esta convocatoria a través de los medios de comunicación. “Lo habitual es que la Consejería de Educación envíe correos electrónicos masivos a los centros para que luego informemos a las familias pero en este caso no ha sido así”, lamenta Amador.
Se trata de una labor de presentación que siempre han realizado las escuelas infantiles pero, afirma la presidenta de Acinte, “nunca en un periodo tan corto de tiempo”. Amador insiste en la importancia que tienen estas subvenciones, a las que se pueden acoger las familias cuyos ingresos estén por debajo de los 24.000 euros anuales para recibir, en este caso, un máximo de 800 euros por menor. Marina Amador explica que, dependiendo de las zonas canarias que se examinen, la demanda puede variar pero lo que es cierto es que son muchas las familias que se benefician cada año de estas ayudas directas para el fomento de la escolarización temprana del alumnado de 0 a 3 años.
