Indignación y desasosiego. El sector de la restauración está “al límite” y las nuevas restricciones suponen un nuevo escollo para mantener a flote a muchos negocios de la isla. Según la representación del sector, uno de cada tres bares y restaurantes de Tenerife están en riesgo de desaparecer y la nueva imposición de toque de queda y de límite de personas por mesa, no hace más que agravarlo.
“Otra vez ha ocurrido lo mismo, nos avisan el viernes de algo que se impone el sábado”, aseveró molesto Ramón Fariña, presidente de la Asociación de Empresarios de Restauración y Ocio (AERO). Fariña criticó que el Gobierno de Canarias no les haya tenido en cuenta a la hora de imponer las nuevas restricciones en la isla, por las que temen que tendrán que cerrar antes y anular reservas ya hechas en días previos. “Esta noticia nos llega en pleno puente de la Constitución, en el que muchos empresarios habían visto movimiento de clientela”, señaló Fariña. “No podemos trabajar si no podemos planificar nuestros negocios”, advirtió el representante de los empresarios que mostró su preocupación por la situación y afeó la forma de actuar del Gobierno autónomo.
