El curso escolar ha empezado y aún hay alumnos que no pueden beneficiarse del servicio de comedor. Es la denuncia que realizan diversas familias tinerfeñas más de un mes después de que empezaran las clases. Es el caso del CEO Bethencourt y Molina de la capital chicharrera, donde unos 80 alumnos de Secundaria no han podido aún hacer uso de este servicio que es indispensable para numerosas familias con escasos recursos. Es por esa razón que muchos padres han realizado escritos en los últimos días que, aunque entregados en los centros escolares, van dirigidos a la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias para que revierta esta situación.

El motivo que por el cual hay alumnos que aún no disfrutan del servicio de comedor se explica por la falta de personal. La Consejería de Educación se comprometió a contratar auxiliares para poder hacer frente al aumento de grupos que conllevaría el establecimiento de grupos reducidos para acudir al comedor. En el caso del CEO Bethencourt y Molina, en cursos anteriores tan solo había dos turnos de comida mientras que este año se han tenido que organizar hasta cinco para mantener la distancia de seguridad. A pesar de que ya han recibido a los dos auxiliares prometidos por la Consejería, hay otros dos trabajadores de baja, lo que impide que se pueda ofrecer servicio para los cinco turnos establecidos.

Mientras que este centro ya ha recibido a los auxiliares prometidos, hay otros colegios que aún no cuentan con este personal extra porque la Consejería está priorizando la contratación de los 2.500 docentes prometidos para el nuevo curso. Mientras tanto, algunos comedores permanecen cerrados y los alumnos no reciben este servicio tan imprescindible para algunas familias. Y es que no solo es vital para los menores con escasos recursos sino que también facilita la conciliación familiar.

Rosalva González es la presidenta del AMPA del CEO Bethencourt y Molina y afirma estar preocupada por esta situación, sobre todo en lo relacionado con las familias con menos recursos económicos. La asociación de padres y madres de este centro también ha remitido escritos a la Consejería, al mismo tiempo que solicita "paciencia" a las familias que no están recibiendo este servicio porque afirma que el centro ya lo tiene todo listo para comenzar a trabajar en cuanto reciban al personal necesario.

María Isabel Elmasry es madre de uno de los estudiantes de Secundaria del CEO Bethencourt y Molina que no puede ir al comedor. En un escrito remitido a Educación afirma que "tenemos la necesidad de poder conciliar la vida laboral con el colegio, aparte de muchas familias que están en estado precario y con la subvención de comedor aceptada que hasta la fecha no pueden dar uso del mismo".

Y es que este problema afecta además a alumnos de cuota cero que encontraban en el servicio de comedor una de las únicas comidas que podrían ingerir a lo largo del día. Es el caso de Margarita Infante cuyo hijo de 13 años se beneficia de este programa de cuota cero. "Soy madre soltera y tengo otro hijo de 18 años. Necesito el servicio de comedor y no entiendo por qué no se está ofreciendo", afirma la chicharrera quien añade que también está teniendo problemas para recibir las ayudas para la adquisición de material escolar.