Que el virus pueda ser estacional, y solo haga acto de presencia en invierno, es cada vez es una posibilidad más lejana a lo que está mostrando la realidad. Los cinco brotes activos en el Archipiélago (dos en Fuerteventura, dos en Tenerife y uno en Gran Canaria) junto a la situación en la que se encuentran muchas regiones peninsulares, están activando las alarmas de los sanitarios canarios que ya esperan que en pocas semanas se pueda dar esa segunda ola de Covid-19 en el Archipiélago que se había previsto para octubre.

En el día de ayer se dieron tan solo dos casos nuevos de coronavirus, uno relacionado con el brote local que afecta a Tenerife y otro de los asistentes de la fiesta de 40 personas en Fuerteventura. Tras tres semanas registrando poco más de 10 casos semanales, Canarias ha pasado a registrar hasta el momento 28. De ellos, 18 se dieron en el día de ayer: 6 se dieron en Tenerife, 5 en Gran Canaria, 3 en Lanzarote y 2 en Fuerteventura. En total, Canarias ha registrado, desde que empezó la pandemia 2.487 casos de coronavirus, el 61% en Tenerife.

La curva epidémica crece levemente. En los últimos días, la curva epidémica ha empezado a crecer, aunque lo ha hecho levemente. En el día de ayer, los casos activos en el Archipiélago ascendieron a 81. De estos, 18 se encuentran en la isla de Tenerife y uno de ellos, un extranjero estadounidense, se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos. En Gran Canaria hay otros 19 casos activos y uno de ellos se encuentra en planta. Lanzarote cuenta con 6 casos activos -cinco de ellos migrantes- y Fuerteventura es la isla más afectada actualmente con 30 casos activos. De estos, seis tienen relación con la celebración de una fiesta privada de 40 personas en la isla, y el resto son migrantes. No obstante, parte de las personas llegadas a la isla en cayuco o patera, han dado negativo ya en el virus.

El paciente ceroA pesar de que la Consejería de Sanidad ha considerado a una mujer de Fuerteventura como la paciente cero que provocó el brote en Fuerteventura y Gran Canaria, Sanidad ha estado indagando y considera que su hermano -que vino de vacaciones desde México- pudo haber estado involucrado en el contagio. Según corroboró la Administración sanitaria, el paciente ha dado positivo en anticuerpos, lo que significa que ha pasado la enfermedad y no se descarta que haya sido el foco de contagio del resto de la familia.

Controles policiales para que se use mascarilla. El Gobierno de Canarias activará este fin de semana controles policiales para garantizar el uso de la mascarilla como una medida fundamental de protección frente a la Covid-19. Se hará una especial vigilancia en encuentros lúdicos y festivos como bares, discotecas, fiestas en villas o celebraciones en espacios abiertos. Este despliegue será ejecutado por efectivos de la Policía Canaria, Policía Local y Fuerzas de Seguridad del Estado. El incumplimiento del uso de la mascarilla conlleva una sanción de hasta 100 euros. Desde el Gobierno se recuerda que en Canarias el uso de la mascarilla ya es obligatorio en los espacios cerrados de uso público y también en los abiertos, siempre que no se pueda guardar la distancia mínima interpersonal de al menos 1,5 metros, tal como se recoge en las recomendaciones de prevención establecidas en el Acuerdo del Gobierno de 19 de junio de 2020. En espacios como centros comerciales, la mascarilla es obligatoria puesto que no es posible garantizar siempre esa distancia. Esta medida de protección física frente a la Covid-19 afecta obligatoriamente a toda población mayor de seis años, salvo las situaciones exceptuadas por el Real Decreto ley 21/2020, como presentar algún tipo de enfermedad respiratoria, discapacidad o dependencia y el ejercicio del deporte individual al aire libre, entre otras.

Canarias podría adoptar medidas más restrictivas. El Gobierno de Canarias no descarta tener que adoptar otras medidas más restrictivas, si éstas fueran insuficientes ante un cambio de escenario de la pandemia en Canarias. En este sentido, la Consejería de Sanidad hizo un llamamiento a la responsabilidad de la población para autoprotegerse frente ante la Covid-19 y, por tanto, proteger a la población más vulnerable, evitando contactos estrechos incluso entre familiares. El 40% de los brotes en España están causados por reuniones familiares en las que no se respetan las medidas de seguridad.