Un total de 50 perros guía pertenecientes a la ONCE han acompañado durante estos días de confinamiento a las personas ciegas de Canarias con el fin de aportarles autonomía y seguridad en sus desplazamientos al convertirse en los ojos de quien no puede ver.

Así lo informó la organización en una nota de prensa en la que constató que desde la entrada en vigor del estado de alarma, los perros guía también se quedan en casa.

De hecho, estos animales sólo salen a la calle para acompañar a las personas ciegas a cubrir sus necesidades básicas como realizar la compra en un supermercado, adquirir medicamentos en una farmacia o asistir a una consulta médica. En este sentido, siempre lo hacen con el arnés que los identifica como perros guía, y sin acercarse a otros perros ni sus propietarios.

Ante esta situación la Fundación ONCE del Perro Guía (FOPG) recuerda que ni las personas ciegas ni sus perros tienen capacidad de conocer la distancia de seguridad recomendada por las autoridades -con una separación de dos 2 metros- para evitar posibles contagios. Por ello pide ayuda a la ciudadanía para que, en distintas situaciones diarias, les indiquen mediante la voz y no el tacto, la zona correcta que permita cumplir con la normativa vigente