El Gobierno nacional ya se ha puesto manos a la obra para mandar a Canarias 31.200 test rápidos que llegarán en estos días y que se usarán, previsiblemente, para afrontar la vuelta a la normalidad en las Islas. Estos test servirán para medir si una persona ha pasado ya la enfermedad al medir sus anticuerpos en sangre -las inmunoglobulinas-, pudiendo determinar si ya ha pasado la Covid-19 o si la está pasando en la actualidad. Una información que puede ser especialmente relevante en el momento de reactivar la economía progresivamente. Eso sí, son menos sensibles que las pruebas moleculares (PCR) y tendrán que utilizarse como herramienta complementaria a estas en la detección precoz, otro de los objetivos impuestos por el gobierno estatal para preparar la salida del confinamiento.
El Gobierno de España ha adquirido 1.029.600 unidades de estos test que dan resultados en 15 minutos y que prometen tener una sensibilidad del 80% a partir de que la persona lleve siete o más días infectada, mientras que se reduce al 64% en los pacientes que se la hacen cuando inician síntomas, según el Instituto de Salud Carlos III. Este centro ha sido el encargado de evaluar más de 70 modelos de test rápidos para determinar cuál contaba con mayor sensibilidad.
Lejos quedan ahora los 640.000 test rápidos que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, había prometido repartir entre las comunidades autónomas y que se volatilizaron nada más llegar a nuestro país. Y es que esta primera remesa comprada a un proveedor chino se tuvo que devolver porque su sensibilidad no alcanzaba el 30%.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró ayer que este material -junto a otro de protección- volaría de inmediato hacia las comunidades autónomas y será hoy cuando aterrice en Archipiélago. El objetivo del Ministerio, tal y como indicó Illa, es hacer el máximo número de test posible a las personas que tengan síntomas. "Se están realizando de 15.000 a 20.000 test diarios, pero es necesario aumentar esta capacidad de diagnóstico diario", afirmó. En Canarias se están haciendo entre 800 y 1.000 test diarios. Para el experto en Epidemiología y portavoz del Comité de Expertos del Gobierno de Canarias, Lluís Serra, estos test rápidos servirán para conocer quién ha estado contagiado pasado un tiempo desde que se produjo la infección, porque en ese momento "con la PCR - que mide la carga viral en la muestra- va a dar negativo". Sin embargo, este virus tiene una casuística compleja en lo que se refiere a las personas curadas que ya ha sido descrita en China. En varios estudios de investigación se ha llegado a la conclusión de que hay personas clínicamente curadas que al hacerles el test rápido dan negativo, pero que, sin embargo, siguen portando virus y pueden transmitirlo. Por eso es tan importante que estos test estén acompañados de otras pruebas que permitan ratificar su resultado. Lo ideal es que se acompañe tanto de una PCR como de un cultivo de virus, pero esto último solo está al alcance de algunos hospitales de España que cuentan con laboratorios biológicos.
Canarias sigue frenando los contagios. Los contagios por coronavirus en Canarias son cada vez menores. La tasa de replicación del Sars-Cov-2 en las Islas se encuentra en 0,71 y el número de nuevos casos tan solo ha aumentado un 4,9%. Ayer se constataron 1.730 casos acumulados de Covid-19 en Canarias, 81 más; 88 fallecimientos, 5 más; y 192 altas, 35 más. Además, se han constatado de manera acumulada 651 personas que han requerido hospitalización y 133 lo han hecho en UCI. El total de sanitarios contagiados es de 336.
Hombre de más de 80 años. Los varones de entre 80 y 89 años no son el grupo más afectado en Canarias en términos absolutos por el coronavirus Covid-19, pero sí en cuanto a la incidencia de la enfermedad en función de la población por grupos de sexo y edad, según los datos hechos públicos por la Consejería de Sanidad. En términos estadísticos, en Canarias hay 75,93 enfermos de Covid-19 por cada 100.000 habitantes, una proporción que sube hasta los 213,78 casos por cada 100.000 habitantes entre los varones de entre 80 y 89 años. En ese rango de edad, los casos de mujeres con coronavirus bajan hasta 172,88 por cada 100.000 habitantes.
Precios desorbitados por mascarillas y gel. Las farmacias canarias se están encontrando estos días en la tesitura de comprar o no mascarillas o gel hidroalcóholico. El mercado internacional -predominantemente chino- está saturado y los pocos proveedores que siguen suministrando estos materiales los están vendiendo a precio de oro. Lo confirmó el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Santa Cruz de Tenerife, Manuel Ángel Galván, que afirma que estos días ha visto precios "que asustan" como la venta de dos mascarillas por 25 euros. "La cotización de las mascarillas en China es de 0,72 céntimos cada unidad, antes las cajas estaban a 10 céntimos", explica Galván. Lo mismo pasa con los geles hidroalcóholicos, que, han pasado de costar uno o dos euros a casi siete. "El más caro que teníamos antes costaba cuatro euros", afirma una farmacéutica tinerfeña. El incremento de los precios se desorbita durante el transporte. Un viaje que, además, que se convierte en una verdadera jungla donde siempre gana el mayor postor. "Se puja por el material en pleno vuelo", afirmó Galván, y así es quien proponga una cifra más elevada el que finalmente se queda con el cargamento. "Los farmacéuticos no estamos ganando ni un euro cuando las vendemos, se las vendemos al mismo precio que nos llega", aseguró el presidente, que insistió en que el Gobierno estatal debe ser el encargado de establecer unos precios máximos a estos materiales de protección individual, más aún cuando hay que garantizar su adquisición por parte de la población.
