La consejería de Educación del Gobierno de Canarias ha concedido 3,4 millones de euros para sufragar los estudios universitarios de un total de 2.440 alumnos de las Islas para el curso 2019/2020. Del montante total, 2,2 millones se han ingresado de manera directa a los alumnos, mientras que 1,2 millones se han cedido a las universidades públicas -la Universidad de La Laguna (ULL) y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC)- para que puedan sufragar el gasto de las matrículas de estos alumnos.

Se trata de la primera resolución de la concesión de becas universitarias que realiza el Gobierno de Canarias, que tiene previsto publicar un listado más. Para atender a las necesidades económicas de este colectivo, el Gobierno autonómico dispone de un total de 10,9 millones de euros en sus fondos propios a este concepto. De hecho, como explicó la consejería en un comunicado, la Dirección general de Universidades se encuentra actualmente trabajando en la elaboración de ese segundo listado -primero con carácter provisional- en el que se integrará el resto de solicitudes presentadas por el alumnado canario. En este sentido, la dirección del área tiene previsto publicar esta relación de becas próximamente.

Las personas beneficiarias de estas becas son alumnos universitarios con residencia en Canarias, matriculados en enseñanzas oficiales de Grado o Máster, en universidades públicas canarias, en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) o en universidades públicas del resto del territorio español, cuyos estudios no pueden cursarse en Canarias. La cuantía económica que recibe cada alumno tiene en cuenta su umbral de renta, si para acudir a clase debe residir en una vivienda distinta a su residencia habitual, si su centro de estudios se encuentra en una isla distinta a la suya o su grado de discapacidad.

Como constata la resolución, publicada en el Boletín Oficial de Canarias (BOC) ayer, la mayor parte de la subvención -casi un 80%- se va a destinar a la ULL y su alumnado, mientras que para la ULPGC se han destinado, en principio, 450.076,50 euros del total -aproximadamente el 20%-. En esta primera resolución se han concedido 102.750 euros para 543 alumnos que han tenido que trasladar su residencia habitual para poder continuar estudiando. Esta parte de la beca concede una cuantía fija de 1.500 euros por alumno. Otros 289.600 euros se han otorgado a 694 alumnos por encontrarse dentro de los umbrales económicos que fija la Administración. Concretamente, se concede 1.600 euros para aquellos alumnos que no superen los 3.962 euros de renta en el año 2018 cuando viven solos o los 7.646 cuando lo hacen con un familiar.

El límite del umbral va ascendiendo a medida que se suman miembros a la unidad familiar prácticamente de manera proporcional, multiplicando el número de miembros de la familia por el umbral de renta mínimo.

En cuanto a la parte de la subvención destinada a los estudiantes que deben residir en un lugar distinto al domicilio familiar o fuera de Canarias, se han concedido 411 ayudas de este tipo por un importe total de 44.826,50 euros. Esta retribución se ha concedido a 302 alumnos que van a estudiar en una universidad canaria pero residen en las islas menores, a 106 que han tenido que trasladarse desde Tenerife a Gran Canaria o viceversa, y 3 que han tenido que van a cursar sus estudios presencialmente en la Península y que vivían en una de las islas capitalinas.

Se han otorgado, asimismo, 12.900 euros a 44 alumnos con algún grado de discapacidad. De ellos, 38 se encuentran entre el 33% y el 50% de grado de discapacidad; cinco entre el 50% y el 60%, y uno tiene más del 65%. Para otros tantos, se ha subvencionado únicamente el pago de las tasas universitarias de la primera, segunda y hasta la tercera matrícula.

Requisitos menos exigentes

En esta convocatoria, el gobierno regional ha modificado ligeramente los requisitos de obtención de la ayuda para que pudiera ser complementaria a la que otorga el Ministerio de Educación y Formación Profesional. En este sentido, los umbrales económicos requeridos para percibir las cuantías ligadas a la residencia o al transporte se han elevado en relación a convocatorias pasadas. Y es que, según la Consejería de Educación, la insularidad y la lejanía con la Península suponen un mayor esfuerzo económico a las familias canarias que las que soportan las residentes en la España peninsular, por lo que era conveniente tratar de manera diferenciada a las personas solicitantes con residencia en las islas no capitalinas o que estudian en la Península. Asimismo, los requisitos académicos para percibirla han disminuido, de modo que puedan acceder los alumnos que ha descartado la beca estatal.