La idea tuvo su origen en el propio centro y cuenta con el aval de la dirección, aunque "sería igual para cualquier otro diseño nacido del trabajo de nuestros alumnos". Lo asegura José Ángel Trujillo, vicedirector de la Escuela de Arte y Superior de Diseño (EASD) Fernando Estévez, respecto El Empaquetado, proyecto que firma la alumna de cuarto curso de Diseño de Interiores Davinia Toledo Álvarez. Su iniciativa pasa por rehabilitar la nave industrial anexa, hoy en abandono y usada como almacén, para "ser referente y eje central del Distrito de las Artes en Santa Cruz de Tenerife, la isla y la provincia".

Davinia propone para este espacio un centro de creación contemporánea en la que fuera antigua empaquetadora de plátanos. La idea surge de un trabajo realizado por la alumna en el marco de la asignatura Proyecto Global que imparte Cristina Temes Cordobés. La docente propuso este curso una especie de concurso de ideas y la elegida ha sido El Empaquetado.

José Ángel Trujillo forma parte del equipo directivo que lidera desde hace tres cursos María Jesús Delgado. Valora que "al final del primero, el 2016-2017, nos planteamos la remodelación de la nave". De aquel proyecto, #lanave, partió el ideario del que ha surgido El Empaquetado".

Trujillo explica que "Ayuntamiento de Santa Cruz, Cabildo de Tenerife y Gobierno de Canarias alcanzaron en su día un compromiso para reparar la estructura de estas instalaciones y poder darles otro uso".

Incluso "hace aproximadamente un mes desde Patrimonio del Gobierno de Canarias, el propietario de la nave, nos mostraron el esbozo de un anteproyecto de primera fase porque existe un compromiso por su parte de mejorar sus condiciones. Consistiría en reforzar estructuras, renovar instalaciones de agua o eléctricas, etcétera".

Trujillo expone el pensamiento de la Escuela Fernando Estévez: "Hay muy pocos espacios para las artes performativas y estoy pensando, por ejemplo, en El Tanque de Santa Cruz. El nuestro sería ideal por su posición geográfica lo suficientemente alejada del centro urbano pero no demasiado apartada. Además de dinamizar los barrios cercanos y ser un epicentro de la cultura, en general".

Recuerda Trujillo que "Toledo cursa el cuarto año de Diseño de Interiores, una de las titulaciones que oferta la escuela Fernando Estévez, el centro público de las islas con más variedad de estudios en el ámbito artístico". En la actualidad, entre el Bachillerato de Artes y los grados -equivalentes a FP o a los universitarios- la escuela acoge a más de 800 alumnos.

El proyecto consiste en la rehabilitación de las instalaciones de la nave industrial con el fin de convertirla en un espacio interdisciplinar cuyas actividades estén abiertas a todo el público. En la actualidad, el diseño se encuentra expuesto en el vestíbulo del centro, junto con otras creaciones de alumnos de la escuela, donde puede consultarse por cualquiera.

Trujillo apunta: "Estamos abiertos a gestionar el espacio con muy diferentes posibilidades. Entre ellas convertirlo en aulas del siglo XXI con menos pizarras y más muestras expositivas en vivo de lo que se hace aquí por los futuros diseñadores de moda, interiores, escenografía...".

La distribución del inmueble, muy rico en el catálogo del patrimonio industrial, se basa en la idea de espacios abiertos, polivalentes, fácilmente configurables dependiendo de las actividades que se desarrollen en cada momento.

"Se ha diseñado un espacio de comunicación y aprendizaje continuo donde cada usuario puede ver, desde cualquier parte del inmueble las acciones que se desarrollan en otros sectores de la nave siendo o no participantes directos", explica la propia autora.

"Estas instalaciones -valora José Ángel Trujillo- serían un punto de encuentro entre todos los artistas" que desarrollan su actividad en la zona y podría consolidarse como "un punto de dinamización social, de manera similar a lo que ha ocurrido en Madrid con El Matadero".

El Distrito de las Artes, pendiente de su impulso y consolidación futuras, incluye la Escuela Municipal de Música de Santa Cruz de Tenerife, el Conservatorio de Música, la Escuela de Actores de Canarias, el local de ensayo de la Orquesta Sinfónica de Tenerife, la Escuela de Arte y Superior Fernando Estévez y la antigua Facultad de Bellas Artes de la Universidad de La Laguna. En cinco de estos centros -seis hasta el traslado de la facultad- miles de alumnos se forman cada año.

José Ángel Trujillo subraya para concluir: "Ganar este espacio nos convertiría en referente de ese Distrito de las Artes sin desmerecer a nadie. Por la propia disposición geográfica. Sería importante y daría valor añadido a la Escuela. Y lo proyectan nuestros alumnos". Todo un orgullo.

Arte para la Escuela de Arte

Arte para la Escuela de ArteDesde Perugia, al norte de Roma, donde completa su último curso de carrera dentro del programa Erasmus Davinia Toledo, parte de la segunda promoción de Diseño de Interiores en la Escuela, explicó a El Día: "No hemos cuantificado el coste, pero creo que es bastante asequible porque aprovechamos todo el mobiliario tirado allí. Otro compañero y yo lo inventariamos y se aprovecha en el proyecto". Recuerda que "las instalaciones están en desuso y abandonadas. La principal inversión habría que afrontarla en reforzar la estructura, la instalación eléctrica, fontanería, baños y un ascensor porque mi idea se plasma en dos niveles o plantas". Añadió: "A través de paneles móviles conseguimos una estructura viva y adaptable a las actividades. Diáfana o dividida, según corresponda". Davinia explica un nombre, El Empaquetado, que no es casual: "La nave se construyó en 1960 como empaquetadora de los plátanos de las fincas colindantes. Es un espacio nuevo pero con memoria de lo que hubo y de nuestra cultura del plátano".