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Santa Cruz anuncia que el Rastro volverá a la zona del Mercado en octubre

Finaliza la Acampada por una Vivienda Digna situada junto a Presidencia, zona que necesitaba el mercadillo

Retirada de la Acampada por una Vivienda de una de las zonas del Rastro. E. D.

El Ayuntamiento de Santa Cruz informa de que el Rastro regresará a su anterior emplazamiento, en la zona del Mercado Nuestra Señora de África, a mediados de octubre. Aunque ésta no es la primera fecha que ha anunciado el Consistorio para el traslado del tradicional mercadillo de los domingos en la capital chicharrera, pues ya en abril aseguró que éste se produciría en junio, desde la Corporación local se indica que ya está todo prácticamente preparado para que octubre sea la fecha definitiva. Se prevé que el Rastro, que debido a la pandemia del Covid fue ubicado en la avenida Marítima, vuelva a abrir sus puertas junto a La Recova el 19 ó 23 de octubre.

Precisamente, ayer, los responsables de la Acampada por una Vivienda Digna anunciaban el levantamiento de las casetas situadas junto a la sede de Presidencia del Gobierno canario, zona que necesitaba el Rastro para que le traslado se pudiera llevar a cabo. Tras 448 días, los operarios municipales procedieron ayer a la retirada de las casetas.

El Consistorio capitalino acogió estos días una reunión entre las áreas municipales implicadas y la presidenta del Rastro, Carmen Tejera, para establecer los detalles del regreso del mercadillo a la zona del Mercado.

«Todavía estamos pendientes de algún informe sectorial, pero ya podemos decir que el traslado de los 412 puestos, que son los que cuentan con autorización, se producirá a mediados de octubre. El regreso será lo más organizado posible y debemos afinar muy bien los horarios de montaje», ha comentado el edil de Promoción Económica, Alfonso Cabello (CC).

Por su parte, la presidenta del Rastro muestra su satisfacción ante el hecho de que por fin el traslado se vaya a llevar a cabo. «Hemos sufrido mucho porque la zona de la avenida Marítima no terminó de cuajar. Tenemos mucha gente mayor, que no tenían nada de sombra, y, además, había mucha dificultad para ir a los baños. También nuestros clientes nos demandaban con urgencia el traslado», apunta Carmen Tejera.

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