La explanada del Palmétum, utilizada como zona de aparcamiento, se convertirá desde este viernes, y hasta el 13 de junio, en una feria de atracciones que contará con un total de 28 instalaciones. De estas, 15 son atracciones mecánicas y las otra 13 corresponden a quioscos de papas, algodones de azúcar, hamburguesas y tómbolas, entre otros. La feria abrirá sus puertas todos los días, entre las 17:00 y las 23:00 horas. El edil de Fiestas en Santa Cruz, Alfonso Cabello (CC), ha destacado a EL DÍA que la puesta en marcha de esta iniciativa, «solicitada por los feriantes, supondrá la reactivación de 28 empresas, que darán trabajo a 120 personas».

Sin embargo, el grupo municipal de Unidas Podemos (UP) y el Colectivo de Feriantes de Canarias (Coferca) han denunciado que esta iniciativa no es suficiente y que «deja fuera a los feriantes que peor lo están pasando». Estos solicitan al Ayuntamiento que permita la instalación de autobares y quioscos en diferentes puntos de la ciudad, «y no solo en esta feria del Palmétum». «El grupo de Gobierno (CC, PP y la edil de Cs Evelyn Alonso) está llevando a la ruina a los feriantes por no permitirles instalarse de manera individual en espacios públicos de la capital. Esta sería la única forma con la que podrían obtener ingresos tras 15 meses sin poder ejercer la actividad debido a las constantes restricciones por la pandemia», señala la edil de UP Dolores Espinosa.

Por su parte, el presidente de Coferca, Santiago Martín Regalado, ha explicado que «con la feria del Palmétum lo único que se ha conseguido es beneficiar a unas pocas familias, a unas seis o siete, dejando fuera a un centenar de feriantes de Santa Cruz».

«Lo único que ha hecho el Ayuntamiento es ceder el suelo a una empresa para que esta sea promotora de la feria. Por lo tanto, todo aquel que quiera participar en ella tiene que gastarse como mínimo unos 3.000 euros en documentación. Muchos no disponemos de ese dinero porque no hemos podido trabajar debido al Covid 19. El Consistorio tendría que haber sido el promotor de esta feria y tendría que haber sorteado la instalación de atracciones, para que fuera más justo. Y si no es así, al resto de puestos nos debería permitir instalarnos en diferentes puntos de la ciudad», dice Martín, refiriéndose a los quioscos de comida, bebidas y otros productos.

Al respecto, el edil de Fiestas ha querido dejar claro que la feria del Palmétum se trata de un proyecto que «nos presentaron desde la entidad Promoción y Desarrollo de Eventos y Fiestas Canarias, y cuyo objetivo es ayudar al sector». Lo que ha hecho el Ayuntamiento, explica, es ceder suelo público sin coste alguno para que la iniciativa se pudiera convertir en realidad, «al igual que se ha hecho en otros lugares, como en el municipio grancanario de Gáldar». Asimismo, el edil insiste en que la Corporación local se ha reunido con todas las asociaciones de feriantes existentes «y les hemos planteado alternativas». «El único proyecto que nos presentaron fue el de la feria del Palmétum», comenta.

Con respecto a la posibilidad de ubicar puestos en distintos puntos de la ciudad, el edil indica que «no se dan las condiciones sanitarias ni legales que permitan realizar este tipo de actividades en la vía pública sin poner en marcha medidas específicas de control».