Tras casi medio siglo de conversaciones, de ratos agradables, de cafés y aperitivos frente al Puerto, la mítica cafetería Manhattan, ubicada en la avenida de Anaga de Santa Cruz, cerrará sus puertas el 31 de enero. Así lo ha anunciado a EL DÍA su propietario, Eduardo Morales, quien explica que la crisis del coronavirus Covid 19 y las restricciones para controlar los contagios en la isla de Tenerife han acabado con el negocio. “Hemos hecho todo lo que hemos podido, pero ya me resulta inviable mantener el local abierto”, agrega.

Morales señala que el negocio, desde que comenzó la crisis por la pandemia del Covid 19, solo ha acumulado pérdidas e insiste en que las últimas restricciones dictadas por el Gobierno de Canarias para Tenerife han supuesto un “fuerte varapalo” para el sector de la restauración y la hostelería. Por ello, y según alerta el dueño del Manhattan, en los próximos meses “seguirán desapareciendo locales en Santa Cruz”. “Varios compañeros me han comentado que ya no pueden más”, apunta.

La histórica cafetería Manhattan, situada en el número 7 de la avenida Francisco La Roche (Avenida de Anaga), abrió sus puertas en 1975. Eduardo Morales ha sido su tercer propietario. Aunque en los últimos años, el establecimiento ha funcionado principalmente como cafetería, el Manhattan fue uno de los lugares preferidos para el ocio en la capital, sobre todo por su famosa orquesta de 12 músicos dominicanos que amenizaban las noches de Santa Cruz.

Cuando Morales asumió la gestión del negocio, tuvo que adecuar el local a la normativa vigente, realizando, tal y como cuenta el empresario, una importante inversión para disponer de baños accesibles, entre otras mejoras. El establecimiento se quedó sin su parte interior. “Hace unos 18 meses, solicitamos al Ayuntamiento la licencia para poder contar con un aforo de 48 personas en la terraza, que son unas 15 mesas, pues solo teníamos para 20 clientes. Sin embargo, la burocracia ha ido muy lenta y, a pesar de la voluntad del Consistorio, ese permiso nunca nos llegó. Con las restricciones del Covid, ese aforo se nos quedó en 10 personas”, manifiesta

El establecimiento Manhattan cuenta con ocho empleados. Con respecto a estos, Morales comenta que tendrá que despedir a la mitad y el resto podrá continuar trabajando en otros locales del empresario si la situación no empeora. “Desde el sector de la restauración pedimos a las administraciones algo de flexibilidad, porque nos están asfixiando. Las pérdidas en mis negocios son del 80% y, como yo, numerosos establecimientos”, dice el también presidente de la Asociación de Empresarios de la avenida Marítima. En Santa Cruz, ya han cerrado sus puertas casi 500 empresas por la crisis.