La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz aprobó ayer el proyecto básico de demolición y de ejecución de restitución al estado previo del espacio Arcos de la Noria, quiosco situado en los bajos del Puente Serrador, el cual lleva abandonado varios años. El derribo de este local, que fue uno de los lugares de moda de la capital, acogiendo la actividad de restaurante y de ocio nocturno, tendrá un coste de 126.711 euros y deberá ejecutarse, incluyendo la restitución a su estado anterior, en un plazo de tres meses. El Consistorio chicharrero ha dado vía libre a este proyecto a raíz de que el Cabildo haya emitido un informe favorable autorizando la intervención.

Este quiosco, situado debajo del Puente Serrador, en sus arcos, se construyó en el año 2005, después de que el Ayuntamiento capitalino, con el nacionalista Miguel Zerolo como alcalde, otorgase la correspondiente concesión administrativa para su explotación a la entidad Arcos de la Noria S. L. El concejal de Servicios Públicos, el socialista José Ángel Martín, recuerda que la concesión fue resuelta por los "incumplimientos reiterados" de la sociedad adjudicataria.

"En el año 2012, cuando yo era edil de Urbanismo, se inició un expediente debido a las numerosas quejas vecinales que recibía el Ayuntamiento por ruidos procedentes de este establecimiento. Este tenía otorgada la licencia para la actividad de bar-cafetería, pero se estaban desarrollando también actividades más relacionadas con el ocio nocturno. Se ordenó su clausura y después el Juzgado permitió que volviera a abrir como cafetería. Sin embargó, los encargados de la concesión renunciaron a ella porque ya no les interesaba. Desde el Cabildo se solicitó que el puente recuperase su estado original, para la recuperación del valor arquitectónico del espacio", explica Martín.

A continuación, el Ayuntamiento, en marzo de 2019, encargó a Silvia Buján Álvarez, por un importe de 7.987 euros, el proyecto de derribo del local y de restitución al estado anterior, para el que era necesario contar con el informe favorable del área de Patrimonio Histórico del Cabildo, pues dicho espacio forma parte del Bien de Interés Cultural, con categoría de Conjunto Histórico, del Antiguo Santa Cruz.

El concejal apunta que el Consistorio chicharrero ha estado esperando durante varios meses por dicho informe, pues fue necesario corregir algunos aspectos, relacionados fundamentalmente con la iluminación del puente y con el color que se iba a utilizar cuando se derribase el quiosco. Finalmente, el pasado 21 de mayo, la Corporación insular emitió el informe favorable, "condicionado a que el color que se fuese a aplicar como acabado en los parámetros del puente sea el mismo que el ya existente".

Ante la posibilidad de que el local esté siendo ocupado en la actualidad por personas sin hogar, pues se han colocado enseres en el mismo, el edil indica que tendrán que desalojarlo y "se buscarán alternativas".