Las gestiones realizadas durante los últimos meses por el área de Atención Social, que dirige Marta Arocha, han posibilitado que casi una decena de usuarios del Centro Municipal de Acogida (CMA), popularmente conocido como albergue, hayan sido recolocados en otros centros especializados de la capital.

Según detalla la edil, la mayoría de las derivaciones realizadas hasta ahora tiene que ver con mayores o dependientes que necesitaban una atención distinta a la que se ofrece en el albergue municipal.

Gran parte de estas personas que han salido del Centro Municipal de Acogida son atendidas ahora en recursos sociosanitarios como el Hogar Nuestra Señora de la Candelaria (asilo de ancianos), con quien el Ayuntamiento de Santa Cruz firmó un convenio hace pocas fechas para este fin.

Además de estos usuarios derivados ya desde el CMA, la concejal avanza que se está a la espera de que haya hueco en otros recursos, tanto insulares como locales, para continuar con la reubicación de otras personas cuyo perfil no se ajusta a lo que ofrece el albergue.

Hay que señalar que Arocha se ha reunido en varias ocasiones con responsables del área social de la Corporación insular desde que tomó posesión como concejal con el objeto de buscar una salida a las personas sin hogar que usan el recurso municipal.

La idea que se persigue desde hace varios meses por parte de Atención Social es tratar de descongestionar el albergue, de tal forma que atienda solo aquellos casos para los que se creó.

De hecho, Marta Arocha avanza que Atención Social trabaja ahora mismo con varias entidades de la capital en un proyecto que consiste en poner en marcha un recurso en el que atender a gente sin hogar que vive en la calle y que tiene algún trastorno mental. La idea es contar con algún recurso de siete u ocho plazas en el que puedan ser atendidas.

Reconoce la concejal de la capital que "cuesta" sacar de la calle a personas con este tipo de padecimientos, entre otras cosas porque el Ayuntamiento no dispone de los perfiles profesionales que puedan tratar patologías mentales. Por eso recalca que solicitarán colaboración y financiación tanto al Gobierno de Canarias como al Cabildo de Tenerife para afrontar este asunto.