Cuando llega el 30 de mayo, Día de Canarias, y también el Día Internacional de las Papas en Perú, me vienen a la memoria figuras y personajes singulares que uno ha tenido la suerte de conocer a lo largo de la vida. Es lo que me ha sucedido con dos mujeres canarias muy especiales: María Mérida y Efigenia Borges, ambas nonagenarias. La primera, nacida en la isla de El Hierro, y Efigenia, natural de La Gomera, isla colombina por excelencia. Maria junto al mar, en Tamaduste, y Efigenia en la montaña, cerca de Arure y Las Hayas.

A María, Hija Predilecta de su isla en 1995 y Premio Canarias de Música en 2001, la conocí hace años, cuando coincidimos en la Dehesa Comunal en la fiesta de los Faroles que los pastores herreños ofrecen a su Patrona, la Virgen de los Reyes, junto a la montaña del Caracol. Por entonces trabajaba en el antiguo Icona, el Instituto Nacional para la Conservación de la Naturaleza, liderado por el ingeniero de montes José Miguel González y compartía mi actividad profesional tanto en los montes de El Hierro como en La Gomera. En la isla del Meridiano era responsable de la guardería forestal el recordado Zósimo Hernández, Premio Canarias de Medio Ambiente. Años más tarde escribí libros sobre asuntos relacionados con la Canarias principalmente patrimoniales de las islas de El Hierro y de La Gomera. Uno de ellos era forestal y se refería al Garoé, otro trataba de Tomás Felipe Camacho, un canario ilustrado del siglo XX, por sus trabajos en Cuba. María apareció en los dos, uno por su admiración con el Garoé, árbol sagrado de los bimbaches, y otro por su amistad en La Habana con Camacho y por su relación con la familia de Matías Castañeda durante su estancia en Cuba. Más tarde compartí con María actividades culturales relacionadas con el agua y la música. Tanto en Tenerife como en EL Hierro, en la Casa de Canarias de Madrid como en Zaragoza cuando participamos en el Congreso Internacional del Agua con el Garoé de protagonista. También en Berlín con la amiga alemana Sabine Willmann, afincada en El Sitio de Frontera, y Torsten de Winkel, en la promoción musical con jóvenes discapacitados y con Bimbache Jazz.

En la isla colombina, La Gomera, el responsable forestal era el sobreguarda León Sosa, que actualmente es el funcionario más veterano del organismo autónomo, nonagenario. En este año de 2021 viviremos los cincuenta años del nacimiento del Icona español, ocurrido en 1971. De hecho comencé a trabajar en La Gomera en el otoño de 1966 y terminé en 1987 después de participar en la tramitación del expediente de creación del Parque Nacional de Garajonay en 1981, la inclusión del mismo en la Lista de Bienes naturales del Patrimonio Mundial y la inauguración del Centro de Visitantes de Juego de Bolas, en Agulo. La venta y la casa de comidas de Efigenia se hicieron famosas y familiares desde cuando León Sosa me llevaba a compartir queso y almogrote con Manuel y Efigenia, una pareja singular de Las Hayas. Se convirtieron esenciales por la logística en relación al Parque dada su proximidad al bosque de laurisilva del monte público de Valle Gran Rey y por la hospitalidad gastronómica que ofrecía Efigenia a los visitantes entre los que resultó significativa, décadas más tarde, la que fuera canciller de la República Federal de Alemania, la señora Ángela Merckel. A nivel profesional recuerdo las primeras visitas con los funcionarios y trabajadores del PFE en los años de 1960 incluso en los años 70, con mi familia. Más tarde con el profesor universitario don Telesforo Bravo cuando teníamos reuniones del Patronato del Parque Nacional de Garajonay. Lo cierto es que Efigenia fue reconocida en diferentes medios y por diferentes razones por instituciones en distintos lugares de Canarias y de Europa. Ahora, con motivo del Día de Canarias, es reconocida como Historia Viva de la isla de La Gomera aprovechando el Día de Canarias y por ello lo mejor que hemos podido ofrecerle es un libro, a presentar en su cabildo insular, en la capital de La Gomera, combinando Cultura con Turismo.

Felicitaciones a María y a Efigenia. Estamos orgullosos de ustedes dos por lo que han significado para Canarias en el ámbito global de la cultura. María presumiendo de la música y de una voz única; Efigenia, de la hospitalidad gastronómica y turística. Son unas importantes e históricas referencias del corazón de las Islas. Tengo claro que la cultura de los pueblos se mide no solo por el amor a los árboles sino también por mantener viva la memoria de sus mujeres. Es el caso de María Mérida y de Efigenia Borges.