Mientras continúa el debate político entre quienes defienden las obras que se realizan para dotar de aceras a las tradicionales calzadas de Villa de Mazo para hacerlas accesibles y quienes lamentan que las obras están causando un importante daño al patrimonio histórico del municipio, las entidades sociales y vecinales que realizan los tradicionales arcos del Corpus vertical advierten de la posibilidad de que no sea posible realizar estos importantes elementos de arte efímero.

Muchos de los artistas que son parte activa tradicional en esta celebración se han posicionado en contra de la intervención que se continúa realizando en esa vía del municipio. La misma incluye la sustitución de piedras centenarias por losetas prefabricadas en estas vías de gran pendiente que configuran un parte fundamental e identitaria de la Villa de Mazo.

Son los artistas más antiguos, aquellos que participaron, a mediados del siglo pasado, en la creación de esta celebración tal y como se la conoce en la actualidad, los que han mostrado más rechazo a esta intervención que cambia totalmente el paisaje de las calzadas, al afectar a un elemento que, entienden, es protagonista del Corpus Christi de Villa de Mazo, junto a los arcos y los pasillos de flores que la pueblan.

En línea con las críticas políticas emitidas hasta ahora por entender que los trabajos que se realizan suponen una afección al patrimonio y no resuelven los problemas de accesibilidad que podrían justificarlos, este grupo lamenta que con esta intervención también se pone en peligro la celebración de una fiesta declarada de Interés Turístico Nacional en 1985. En ella, cada barrio decora un tramo de las calzadas con un pasillo de flores sobre el que procesiona el Corpus, además de majestuosos arcos en los que descansa la custodia.

En esa línea, los colectivos vecinales organizan una marcha a celebrar el próximo lunes por esas vías, señalando que «el pueblo de Mazo llorará la agonía de sus calzadas». Para ello, piden a los residentes, en particular, y a los palmeros, en general, que «recorran esta histórica piedra y dejen una flor en señal de despedida, honrando así su memoria con la última alfombra».

Las asociaciones vecinales se suman de esta manera al rechazo a las obras ejecutadas por el Ayuntamiento de Villa de Mazo y el Cabildo insular. Desde los grupos políticos de la oposición municipal y por parte de colectivos como SOS Patrimonio La Palma se sigue demandando la paralización de los trabajos y la reposición de las antiguas piedras.