Badel Albelo (La Laguna, 1981) tomó posesión como concejal lagunero en mayo. Tenor profesional y muy próximo al alcalde, antes de convertirse en edil coordinó Cultura y Actividades Musicales como personal de confianza. Está al frente de Fiestas, pero también, tras la baja por maternidad de su compañera del PSOE Yaiza López, se encargará provisionalmente de Cultura, Participación y el Organismo de Música.

¿Cómo ha ido esta primera etapa en el cargo?

Han sido semanas complicadas porque las fiestas las ha marcado la covid-19 y ha sido una temporada de tomar ciertas decisiones que son dolorosas para un sector que ya viene castigado desde el principio de la pandemia.

¿Cuál es el plan a día de hoy para las fiestas del Cristo?

Las fiestas del Cristo ya están planificadas. Hay que esperar a cómo se desarrolla la pandemia. Tenemos varias acciones para recuperar no solo la actividad artística y festiva, sino también para darle cabida en el mes de septiembre a los feriantes, que se han visto perjudicados en esta pandemia. Queremos hacer ferias de artesanía y ferias de agricultura, ganadería y pesca, todo en espacios controlados y si la situación sanitaria nos lo permite.

A día de hoy, ¿va a haber procesiones en el Cristo?

Con el contexto y datos actuales, las procesiones están totalmente descartadas. Pero es verdad que la pandemia es la que nos marcará el ritmo. En principio, aquellas acciones que discurran en la vía pública que conlleven aglomeraciones, y si los datos son los que tenemos ahora, preferimos aplazarlas o suspenderlas atendiendo a un criterio sanitario y por responsabilidad.

¿Cuándo estima que puede volver a estar la actividad festiva a pleno rendimiento?

Con lo que se viene escuchando a los gobiernos de Canarias y central, y con el ritmo de vacunación que tenemos, yo creo a partir de otoño se podrá ir empezando a abrir la mano. Pero quien marca el ritmo y tiene la voz cantante, por así decirlo, es la pandemia.

¿Qué tienen previsto para lo que queda de año e inicios del siguiente en lo que a recuperación de actividades festivas se refiere?

Vamos a dar continuidad a Noches de La Laguna y también atenderemos las fiestas de los barrios y pueblos de nuestro municipio en la medida de nuestras posibilidades. Si mejoran los datos y nos dan la oportunidad de celebrar actos en la calle, este concejal que le habla garantiza que así va a ser. Después están las fiestas de Tejina, del Cristo... y luego entramos en la campaña de Navidad, que es importantísima.

Ahora, con la baja por maternidad de la concejala Yaiza López, une a Fiestas un par de nuevos calderos, como son Cultura, el Organismo Autónomo de Actividades Musicales y Participación Ciudadana. ¿Cómo lo afronta?

Como yo formaba parte y coordinaba el Organismo Autónomo de Actividades Musicales, la programación siempre ha dependido un poco de mí. Cuando trabajaba para la concejala de Cultura, nosotros siempre, para evitar la improvisación, hemos actuado con muchísima planificación. Con esa labor ya realizada se lleva bien. Cuando yo entré en la política, la única voluntad que conozco, igual que cuando trabajaba en el ámbito privado, es el trabajo.

¿Tienen previsto algún plan o alguna iniciativa para brindar apoyo al sector cultural?

La forma de ayudarlos desde el municipio, y así lo hemos hecho, es programando. Y desde que los datos arrojen mejores cifras y La Laguna sea un municipio donde se puedan hacer actos de manera controlada y segura y la incidencia acumulada no esté como está, la responsabilidad nuestra es programar y generar actividad, que al final es lo que agradecen las productoras y los artistas, y todo el conglomerado que compone esto.

¿Se ha reunido con los grupos del Carnaval?

Sí. El problema que se les presenta ahora es que tienen que ensayar. Volvemos a hablar otra vez de pandemia, de datos… La mayoría ensayan en centros ciudadanos que hemos tenido que cerrar por una cuestión sanitaria. Estos grupos son una de nuestras grandes preocupaciones.

¿Qué opinión le merecen los hechos denunciados por el concejal de Ciudadanos Alfredo Gómez?

Como ya ha dicho el alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, en numerosas ocasiones, lo que él denuncia cuenta con los informes favorables tanto de la Intervención como de los técnicos del Ayuntamiento. Respecto al nivel personal y las denuncias en donde yo he sido protagonista, en los últimos dos vídeos, creo que se caen por su propio peso. Él habla de un interés de contratar a determinados artistas, y yo le puedo garantizar que los dos años de este equipo de gobierno han sido los dos años en los que más artistas y, sobre todo, canarios ha contratado el Ayuntamiento. Si este concejal que le habla no pudiese contratar a ningún artista de los que con él hayan trabajado, aquí no trabajaría nadie. Yo he colaborado con la Orquesta Sinfónica, Los Sabandeños, Achamán, Javier Hernández, Chago Melián, Antonio Hernández, Candelaria González, Besay Pérez…, con casi todos los artistas de Canarias.

El edil ha nombrado a artistas próximos a usted...

En cuanto a Giancarlo Santelli, fue un artista más con el que comparto y compartí un determinado proyecto artístico, pero como he compartido en el último disco de Chago Melián grabando dos temas. Respecto a Silvia Zorita, Alfredo la nombra y le da el valor de que, por el hecho de ser mi pareja, es el motivo por el cual se le contrata. Directamente, ese argumento se cae por su propio peso: Silvia lleva trabajando para este Ayuntamiento desde 2016 y es una de las mejores artistas del panorama lírico en Canarias. Es un criterio tremendamente machista. Y, de las contrataciones que viene haciendo Silvia desde 2016, la época donde menos contratos ha tenido ha sido en la etapa en la que a mí me ha tocado asesorar para su contratación, o no a su contratación, porque lo que yo he contratado ha sido a una empresa determinada o una productora determinada, donde Silvia es una parte de ese contrato. Lo máximo que ha cobrado, y lo puedo demostrar, han sido 420 euros.

¿Usted tiene más perfil de gestor cultural que de político?

No lo sé… Yo vengo del sector privado y mi formación ha sido como gestor cultural, pero siempre he tenido inquietudes políticas, porque siempre he querido lo mejor para el interés general, para la ciudadanía. Este proyecto en el que estoy ahora, que es el proyecto de Luis Yeray, no es algo que se haya fraguado de un día para otro, sino que ha sido a fuego lento, donde él me ha intentando involucrar en un plan, en una hoja de ruta, y estoy por unas convicciones políticas y personales. Estoy muy contento y tengo muchísimas ganas de seguir aportando mis conocimientos y mis ganas de trabajar al municipio.

¿Cómo es la relación del área con los estamentos religiosos, presentes de fondo en muchas de las fiestas?

Cierto es que estamos en un estado aconfesional, pero no cabe duda de que el Corpus, San Benito, el Cristo… tienen connotaciones religiosas. La relación puedo decir tranquilamente que goza de salud y de un diálogo fluido entre la parte religiosa y nosotros.

¿Sigue cantando?

¡En la ducha! (se ríe). Sí, sigo cantando, porque el estudio del canto no se puede abandonar. Es verdad que carezco de tiempo y he tenido que cancelar muchos contratos que ya tenía, porque ahora mismo, hasta final de año, tengo régimen de exclusividad. Ya el año que viene hay varios proyectos que están sobre la mesa e igual sí me pido el régimen de compatibilidad, como cuando un concejal, a veces abogado, pide la compatibilidad y ejerce su profesión. La mía de los últimos diez años ha sido cantar. Si los contratos merecen la pena y el proyecto me lo permite, probablemente haga ambas cosas.

¿Cómo se ve tras 2023, una vez que concluya el mandato?

Yo espero, deseo y es mi ambición política continuar en este proyecto junto a Luis Yeray y poder seguir aportando mis conocimientos y mi forma de trabajar a la gestión pública.