La Laguna es la ciudad con menos nacimientos de toda España, con una media que no llega a un hijo (0,89) por cada mujer. Pero este grave problema no solo afecta en el Archipiélago a la ciudad universitaria, capital del tercer municipio más poblado (155.000 habitantes). Otras tres ciudades canarias están entre los cinco últimos puestos en el índice de natalidad nacional de las 416 urbes con más de 20.000 habitantes: Telde (2º puesto por la cola, con una media de 0,95), Las Palmas de Gran Canaria (3º, con 0,96) y Santa Cruz de Tenerife (5º por la cola, con 0,97 hijos por mujer).
Además de ser la región con menos alumbramientos, es la que tiene menos esperanza de vida del país: la 5ª ciudad con menor esperanza de vida es Arrecife, con 81 años; la 6ª es Telde, también con 81; la 8ª es Las Palmas de Gran Canaria, con 81,1; y la 12ª es Santa Cruz de Tenerife, con 81,4 años. Es decir, los canarios tienen muy pocos hijos y mueren antes que cualquier otro español. Es el «preocupante» panorama que dibuja el balance estadístico Indicadores Urbanos, cuyos resultados fueron presentados ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Juan José Hernández, secretario técnico del Colegio de Economistas de Santa Cruz de Tenerife, opina que son números no solo preocupantes, sino «reveladores». «Es una foto que contrasta con esa sensación que tenemos de vivir en la eterna primavera».
«La natalidad es desarrollo y crecimiento, mientras que esta estadística refleja todo lo contrario, los niveles más altos de envejecimiento del país. Es un panorama que compromete el futuro y pone a las Islas ante el peligro de sufrir un atasco asistencial ante una población cada vez más envejecida», destaca Juan José Hernández, que añade que los datos económicos tampoco son «buenos».
Las estadísticas económicas isleñas no son tan sombrías como las de natalidad y esperanza de vida pero pintan una comunidad muy desigual, empobrecida y con índices muy altos de desempleo. De esta manera, las ciudades del G4 de Canarias –las cuatro más pobladas– se encuentran entre las 25 de este estudio con peores tasas de paro: Santa Cruz de Tenerife (puesto 11 por la cola, con 24,28% de la población activa sin trabajo), Telde (14º, con un 23,77%), La Laguna (16º, con 23,48%) y Las Palmas de Gran Canaria (24º, con un 22,8%).
Asimismo, cuatro municipios del norte y el sur de Tenerife se encuentran entre los 50 de España con menos riqueza. Se trata de Icod de los Vinos (en el puesto 23 de los que tienen menos renta media anual por habitante, con 8.415 euros), Arona (puesto 25, con 8.452 euros), San Miguel de Abona (puesto 40, con 8.679 euros) y Los Realejos (49, con 8.877 euros). Están a mucha distancia de las localidades más ricas de la nación: Pozuelo de Alarcón (Comunidad de Madrid, 28.326 euros), Boadilla del Monte (Comunidad de Madrid, 21.795 euros) y Sant Cugat del Vallés (provincia de Barcelona, 20.582 euros de renta media por habitante).
El secretario técnico del Colegio de Economistas considera, con respecto a la baja natalidad de La Laguna, que se debe en parte «a la gran pérdida de población inmigrante» durante la crisis del estallido de la burbuja inmobiliaria entre 2006 y 2012. «En un estudio que realizamos ya detectamos la gran pérdida de población inmigrante experimentada desde 2006 en La Laguna. Y cito la población inmigrante porque es la que eleva los índices de natalidad en España. Fíjese que entre las ciudades con más nacimientos se encuentran Melilla (2,17 hijos por cada mujer), Ceuta (1,62) o La Línea de la Concepción (1,62), con índices muy altos de población extranjera», detalla Juan José Hernández, quien atisba «un futuro de posibles colapsos en los servicios sociales si no se buscan soluciones y se coge el toro por los cuernos». «Los ayuntamientos necesitan todo lo contrario: más natalidad y más población joven y activa para garantizarse buenos ingresos a través de los tributos y generar economía», subraya.
Con respecto a los datos económicos, observa una tendencia al empobrecimiento en los municipios de Tenerife y una acumulación de importantes fortunas en los de Gran Canaria que «engordan» las rentas medias por habitante. El balance estadístico Indicadores Urbanos, presentado ayer, así lo refleja «de forma clara». Entre los municipios con más de 20.000 habitantes, ninguno de Gran Canaria baja de los 9.000 euros de media al año de renta por cada residente, mientras que en Tenerife lo hacen seis: los mencionados Icod, Arona, San Miguel de Abona y Los Realejos, así como Granadilla de Abona (8.894 euros) y Guía de Isora (8.908 euros). Teguise (Lanzarote) se sitúa como el más rico (11.908 euros de renta por habitante), seguido de Las Palmas de Gran Canaria (11.903 euros).
Lo que más preocupa a este economista y analista son las «escandalosas» tasas de paro. «A los problemas estructurales de siempre, de una economía demasiado dependiente del sector de los servicios, se suman ahora los estragos de la pandemia del coronavirus, que ha creado todavía más problemas», asegura Hernández, para quien la tendencia al enriquecimiento de Gran Canaria «se debe a que los pocos que acumulan grandes fortunas en Canarias se están asentando en esa Isla, lo que dispara y distorsiona las medias de las rentas por habitante».
