El grupo de gobierno del Ayuntamiento de La Laguna sacó ayer adelante el presupuesto para este año con el apoyo de sus socios –PSOE, Unidas y Avante– y de dos de las formaciones de la oposición: Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs). Las cuentas, de 168,5 millones de euros, no recibieron el respaldo de Coalición Canaria (CC). El pleno en el que fueron abordadas tuvo como uno sus elementos más destacados la ausencia de las siempre habituales enmiendas. Atteneri Falero, que asumió ayer la portavocía nacionalista, explicó el motivo de lo ocurrido: el texto definitivo lo recibieron el lunes y se enteraron de la celebración de la sesión el miércoles por los medios de comunicación. “Se nos ha hurtado, y también a la ciudadanía, nuestro derecho a la información”, afirmó la concejala sobre un asunto que siempre fue criticado en mandatos anteriores.

Aunque el PP y Cs dieron su apoyo al presupuesto, también se refirieron previamente a la prisa entre la recepción de la información y la cita plenaria. “No es la primera vez que uno ha tenido que debatir presupuestos en estas condiciones o de mayor precariedad”, diría después Santiago Pérez. El líder de Unidas, Rubens Ascanio, tampoco rechazó las quejas de la oposición, aunque su guiño lo circunscribió a “los grupos que todavía no han pasado por el gobierno”: “Tienen un nivel de crítica que es razonable con respecto a los tiempos y a los espacios de debate y de reflexión”.

El edil de Hacienda y Asuntos Económicos, Alejandro Marrero (PSOE), señaló que la premura era para que entrase en vigor “lo antes posible”. Respondía con ello también a las intervenciones de Falero y de Juan Antonio Molina (Cs), que mostraron sus dudas sobre el carácter de urgencia de la convocatoria. “Son los presupuestos más sociales y realistas de la historia de este ayuntamiento”, defendió Marrero en su primera intervención del debate.

“Presupuesto base cero”

El titular de Hacienda expuso que el documento es resultado de un “análisis exhaustivo” y de un “presupuesto base cero”, esto es, en el que no tomaron como referencia las cuantías establecidas en ejercicios anteriores. En adelante, el también portavoz socialista recorrió las ideas y datos que ya había dado la víspera en la presentación de las cuentas ante los medios: protagonismo de Bienestar Social, reducción de ingresos menor de la prevista, un millón y medio de euros para vivienda...

“Votaremos afirmativamente a este presupuesto; no tenemos intención de polemizar”, avanzó Molina al comienzo de su alocución, y se refirió a continuación a uno de los nudos gordianos de todo presupuesto: la ejecución. “La dirección es lo importante”, manifestó. “De nada sirve consignar una cantidad para una determinada área si después no se ejecuta”, opinó el concejal de Cs. También tuvo palabras para la gestión de Comercio y las polémicas ayudas de ese departamento, sobre las que dijo que fueron un “verdadero fracaso” y difíciles de tramitar. Eso llevó a que la edil del área, María José Roca (Unidas), entrase telemáticamente en la sesión para “tomar la palabra en nombre de los técnicos del área de Comercio” y precisar que los documentos solicitados eran cinco. Molina remató más adelante que, si hay 1.000 solicitudes y hay que presentar cinco documentos, ya son 5.000 documentos a gestionar por el personal municipal.

Por su parte, el portavoz del PP, Manuel Gómez, apuntó que, “en tiempos difíciles, presupuestos difíciles”. Y agregó: “La situación es muy complicada”. Además de indicar que, “evidentemente”, no son las cuentas que hubiese presentado el PP, planteó que esta formación “siempre ha estado tendiendo la mano”. Se refirió a algunas propuestas, como la atención telefónica municipal; dotar de una unidad administrativa de apoyo a la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones, que preside la también conservadora Elsa Ávila; el reconocimiento a artistas laguneros, o ayudas a asociaciones musicales, entre otras.

Un escenario difícil

“Hay una situación tremendamente complicada que nos obliga a tomar determinaciones y a mover el municipio en un sentido de apostar por lo social y la reactivación”, dijo Rubens Ascanio, que insistió en las críticas a CC por no haber presentado enmiendas al documento y, en cambio, sí enviar una nota de prensa criticando la ejecución presupuestaria del gobierno en 2020. Según manifestó, la versión que aportaron los nacionalistas “no tiene nada que ver con la realidad”. “Creemos que este es el mejor presupuesto posible”, cerró una de sus intervenciones. Santiago Pérez se centró en la utilización de la técnica de base cero y en que el grupo de gobierno lagunero ha situado como prioridades para el presente ejercicio la atención a las demandas sociales y la reactivación del empleo.

La portavoz de CC lamentó el incremento del paro en el municipio, consideró que la cantidad con la que está dotada Bienestar Social es insuficiente y afeó al gobierno que lleva “dos años viviendo de las rentas”. El cierre de su intervención fue más crítico, si cabe, al expresar que el voto desfavorable de los nacionalistas al presupuesto de 2021 lo era también “contra el equipo de gobierno; el postureo; la propaganda; la falta de estrategia, de iniciativa y de liderazgo; el desconocimieto; la soberbia; la distorsión de la realidad; la mentira; las campañas de acoso al adversario político...”, entre otros aspectos.

La última intervención de la tarde fue del alcalde lagunero, Luis Yeray Gutiérrez (PSOE), en la que agradeció la labor “de cada uno de los concejales del gobierno” y que el PP y Cs estuviesen “a la altura de las circunstancias”. También se dirigió al principal partido de la oposición, CC: “Espero y deseo que, durante todo este tiempo que va a venir con complicaciones, podernos encontrar”.