A José Antonio Jara siempre le generó una profunda impotencia llegar en ambulancia a atender una parada cardíaca y terminar comunicándole a la familia que el paciente había muerto. "Me taladraba la cabeza", admite. Sabía que una asistencia en los primeros minutos podría haber cambiado el final y veía que, por más que se especializaba, no conseguía grandes resultados. "Los casos que se producían en urgencias sí los sacaba adelante, pero no los que se daban fuera de los centros sanitarios", explica. Aquellas vivencias profesionales y horas de estudio comparando formas de abordar estos episodios han cristalizado en RCP Tour La Laguna, un proyecto altruista con el objetivo de formar al 100% de los laguneros en reanimación cardiopulmonar (RCP) y en el uso de desfibriladores, y que también tiene la finalidad de promover el acceso público a estos aparatos.

"En 2004, en Japón se dictó una ley nacional que liberalizó tanto la aplicación de la RCP como el uso por cualquier persona de los aparatos de desfibrilación", apunta Jara, antes de destacar que el resultado fue que la supervivencia se multiplicó. Significaba aquello que el éxito no estaba en manos de los profesionales sanitarios, sino de un testigo que iniciase la reanimación.

El plan estratégico que ha diseñado cuenta con tres fases, denominadas fase de cardiocompromiso, fase de cardioprotección y fase cardiorresponsable. La primera sienta las bases al incluir las maniobras de primeros auxilios (Maniobra de Heimlich), la divulgación de la reanimación cardiopulmonar y la instrucción en conceptos básicos y uso de los desfibriladores. Mientras que la segunda etapa agrega el despliegue de los aparatos de desfibrilación, la tercera incorpora los también relevantes hábitos de vida cardiosaludables, como una dieta sana y la realización de ejercicio.

RCP Tour La Laguna es parte de un plan estratégico nacional para la lucha contra la muerte súbita. Ya se encuentra en marcha en el municipio, si bien lo que ha ocurrido es que la pandemia de la covid-19 ha supuesto un escollo al limitar la realización de actos a gran escala. Y es que el camino para ese objetivo deseado de alcanzar al 100% de la población, o al menos para llegar al mayor número de personas, es la celebración de citas multitudinarias. "Cuanta más gente, mejor; cuando voy a un colegio no hago distinción, sino que está abierto a los chicos, a los profesores, al personal auxiliar, a todas las novias, novios, hermanos? que quieran participar", manifiesta José Antonio Jara. Pone el ejemplo del IES San Benito, "un instituto líder en la lucha contra la muerte súbita con la formación del 100% de sus alumnos".

En cuanto a esos actos, expone que se dividen en sesiones de entre 45 minutos y una hora. "Es una formación que es muy americana y del norte de Europa", expresa el médico, que ha dado los primeros pasos gracias a un grupo de patrocinadores y también ha logrado el respaldo del Ayuntamiento de La Laguna, que colaborará en la logística y con los permisos para la utilización de espacios públicos. A juicio del facultativo, la Ciudad de los Adelantados está poniendo con esta iniciativa "la primera piedra para estar entre los municipios líderes mundiales en la lucha contra la muerte súbita", que es "la primera causa de muerte evitable en el mundo desarrollado, salvo en África". Y añade en la misma línea: "Es un problema de salud pública a nivel mundial".

"Los estudios epidemiológicos japoneses son un pilar fundamental de nuestro proyecto", comenta el galeno, y puntualiza que al final lo que se intenta es que haya alguien que mantenga a la víctima con vida hasta que se produce la llegada del 112.

"Un proyecto fantástico"

El concejal lagunero de Sanidad, José Luis Hernández, considera que se trata de "un proyecto fantástico". Tras una acción formativa para el personal del consistorio coincidiendo con el Día Europeo de Concienciación ante el Paro Cardíaco, el edil señala que el siguiente paso por parte de la corporación será comprar once desfibriladores para instalar en los centros ciudadanos de mayor actividad. La previsión es continuar el próximo año con esa tarea, afirma Hernández, que resalta que la iniciativa viene también a dar respuesta a acuerdos plenarios que se habían adoptado antes de este mandato, como fue el planteado por el exportavoz local del Partido Popular (PP), Antonio Alarcó, para que La Laguna fuese una ciudad cardiosaludable.

"Le alabo al concejal de Sanidad de La Laguna que se haya hecho eco de esta necesidad", agradece Jara, que insiste en la importancia de que haya ciudadanos instruidos en esta materia. "Formamos a la población de La Laguna y, nada más que con eso, la supervivencia sube al 90% sin secuelas", ilustra. "Yo uso una máxima: no hay vida sin testigo. Si me dicen que ahora mismo se está generando una parada en un lugar y no hay un vecino formado en RCP y uso del DEA que inicie las maniobras, diría que la probabilidad de supervivencia es próxima a cero", contrapone el profesional, que indica que el 85% de las muertes súbitas se dan en domicilios, puestos de trabajo y espacios públicos.

Además, precisa que el tiempo entre que el paciente cae fulminado al suelo y hasta que se dispara el desfibrilador externo automático (DEA) no debe ser mayor de seis minutos. De ellos, los cuatro primeros son "de oro". "La frase no lo toquen hasta que llegue el médico está muy bien en una urgencia de traumatismo cervical o de cráneo", diferencia, y resalta que aquí es "vital" implicar al vecino. Conseguirlo supone algo así como que haya un potencial rescatador en cada esquina. Y eso es lo que ahora se está persiguiendo con RCP Tour La Laguna.