“Continuidad”. Fue el título con el que EL DÍA se presentó en los kioscos el 15 de febrero de 1939 para tomar el relevo a La Prensa de Leoncio Rodríguez tras la fusión con Amanecer, por imperativo desde ese momento del Movimiento Nacional, consecuencia de la etapa política que se vivía en España desde el año 1936. El fundador se apartó de la primera línea informativa, promoviendo un apartado más cultural desde las páginas del rotativo.
El escritor Francisco Aguilar y Paz, que fuera colaborador de El Socialista, fue designado director por el Régimen entre 1939 y 1940, a quien lo sucedió hasta 1953 Agustín Santos Hernández, exsecretario provincial de Prensa y Propaganda de Falange y director de Amanecer, que fue relevado por un error intencionado. Le siguió Rufo Gamazo Rico, zamorano y antiguo colaborador de La Prensa, quien había sido jefe de Información en Barcelona, hasta 1958, cuando llega a EL DÍA Ernesto Salcedo Vílchez, el último director que designa el Movimiento, y considerado como el protagonista, junto a la Redacción que le rodeó, de la apertura ideológica a la izquierda, lo que le valió el reconocimiento en la profesión y la sociedad en general.
Ya en 1955, el mismo año de la muerte de Leoncio Rodríguez (fallecido el 8 de enero), el régimen franquista restituye la propiedad a los quince herederos de Leoncio Rodríguez y su segunda esposa, Aurelia Cruz Delgado; ambas familias estaban representadas por los apoderados y sobrinos José Rodríguez y Ángel Cruz.
Ernesto Salcedo, natural de Huelva, protagoniza dos décadas de periodismo brillante y reconocimiento social también por el valor de su opinión que plasmaba en la columna En dos palabras cuando se fraguó la llegada y puesta en marcha de la Democracia; desde el 1 de marzo de 1978 hasta el 20 de abril de 1986 -cuando falleció- Salcedo continúa vinculado a EL DÍA como asesor de Publicaciones.
1978 es un año convulso al frente de la Dirección de EL DÍA porque se suceden, primero, Francisco Hernández Díaz, conocido en la Redacción como Pancho Pantera, quien había sido redactor jefe en la Hoja del Lunes, que editaba la Asociación de la Prensa de Tenerife, a quien sucedió Francisco Ayala, licenciado en Químicas por la Universidad de La Laguna, que había comenzado en la Redacción de EL DÍA en 1964 primero como redactor para ascender a redactor jefe, subdirector y, finalmente, durante seis meses como director. Pero la huella de Ernesto Salcedo fue imposible de igualar.
En 1955, el mismo año de la muerte de Leoncio Rodríguez, el régimen franquista restituye la propiedad a los quince herederos del fundador
En 1978, la propiedad familiar designa a José Manuel de Pablos Coello director de EL DÍA, que continuaría vinculado a la Casa durante una década, si bien en 1981 José Rodríguez logra el reconocimiento de periodista de la Asociación de la Prensa y desde entonces compaginaría la dirección y la gerencia hasta su fallecimiento, en 2014. Si De Pablos trajo el color al periódico, José Rodríguez logró la expansión como grupo de comunicación multimedia.
Aunque sin el reconocimiento como director, José Rodríguez encomienda en 1990 a Manuel Trapote ponerse al frente de la Redacción coincidiendo con el cambio tecnológico que se plasmó en las páginas con el diseño de Ricardo Bermejo desde el 1 de diciembre de ese año, por el que incluso el periódico recibió un premio internacional, si bien Ricardo Acirón mantenía el control de la información en EL DÍA, como ocurrió hasta poco antes de su jubilación.
Ernesto Salcedo, natural de Huelva, protagoniza dos décadas de periodismo brillante y reconocimiento social también como director de EL DÍA
José Rodríguez fallece el 8 de abril de 2015 y asume la dirección su hija Mercedes Rodríguez, hasta el 8 de febrero de 2019 cuando la propiedad familiar vende la cabecera a Prensa Ibérica, que toma el control del periódico hasta la fecha, con Joaquín Catalán Ramos al frente, licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra que se incorporó el 11 de marzo de 1989 a la Redacción, para en noviembre del año siguiente asumir la jefatura de sección y entre 1991 y 1992 la corresponsalía de EL DÍA en Las Palmas de Gran Canaria, coincidiendo con el periodo en que realizó el Servicio Militar. Al finalizarlo regresó a la Redacción de la Avenida Buenos Aires, donde en el año 2000 fue designado redactor jefe y en 2002, subdirector, hasta que en 2007 afronta la dirección de La Gaceta de Canarias y luego de La Opinión de Tenerife, esta última cabecera de Prensa Ibérica, siendo el director del 110 aniversario de EL DÍA.
La propiedad de EL DÍA
Leoncio Rodríguez fue el periodista y la cara visible de La Prensa que contó con el arrope económico en su proyecto de la familia de su esposa, Aurelia Cruz, en particular del cuñado del fundador, Manuel Cruz Delgado, que actuó como patriarca de la familia dada su condición de primer delegado de Trasmediterránea y también estuvo al frente de la consignataria Aucona y la aseguradora La Unión y el Fénix, responsabilidades que a la postre asumió su sobrino Ángel Cruz Fernández.
Durante su dirección, se establecen dos etapas, la primera, desde la fundación el 15 de octubre de 1910 hasta la intervención del régimen franquista, que obliga a la fusión con el Amanecer, en 1939, de donde nace EL DÍA. Coincidiendo con el fallecimiento de Leoncio Rodríguez, el régimen restituye la propiedad a sus herederos, las familias Rodríguez y Cruz.
La transición administrativa entre La Prensa y EL DÍA la realizó Julio Fernández, quien se incorporó el 1 de enero de 1931 hasta su jubilación el 6 de febrero de 1976. Propietario de la imprenta El Comercio, también editó el Aire Libre. El 1 de febrero de 1958, asume la gerencia de EL DÍA José de la Riba, persona de confianza de la familia Cruz, en particular de Ángel Cruz Fernández, quien jugaría un papel fundamental en el devenir de la empresa periodística hasta que a comienzo de los años ochenta la otra parte de la propiedad, que representaba José Rodríguez, lograra la mayoría del accionariado, que acabó en manos del referido José Rodríguez.
Gracias a la solvencia económica de Ángel Cruz Fernández EL DÍA construye y se traslada en 1967 al número 69 de la avenida Buenos Aires y diez años después repite experiencia, esta vez en el número 71, al lado de la que fue su segunda sede tras abandonar la calle Valentín Sanz, coincidiendo con un importante cambio tecnológico.
El 1 de enero de 1974 se incorpora Mira Trujillo para preparar la jubilación de Julio Fernández como administrador, y permaneció en EL DÍA hasta el 18 de julio de 1988, cuando se jubila por invalidez.
En los setenta irrumpen en EL DÍA dos personas de gran relevancia en el devenir de la cabecera hasta comienzos del siglo XX: Ricardo Acirón, que se incorporó el 1 de octubre de 1972 como redactor para desempeñar tareas de secretario de Redacción y desde el 1 de julio de 1980 como director de Jornada Deportiva, para continuar en los noventa como adjunto a la Dirección hasta octubre de 2002. El director y propietario de EL DÍA designa entonces a Joaquín Catalán Ramos subdirector y a Julio Rodríguez de la Plata, subdirector adjunto. En sus inicios, Acirón, maestro de escuela (titulado en 1960), fue representante de UGT y luego cursó el grado de Periodismo por la Universidad de Navarra (1961), donde logró su licenciatura en 1981, para luego realzar el doctorado en la Universidad Complutense de Madrid (1986) hasta asumir la cátedra de Periodismo en la Universidad de La Laguna, en 1991, tras la creación que promovió con la puerta en marcha del Cicicom.
Acirón fue pieza fundamental en el equipo de José Rodríguez desde la Redacción, de la misma forma que Antonio Rodríguez fue clave para la gestión y gerencia de la Administración. Estando José de la Riba en la gerencia de EL DÍA, Antonio Rodríguez se incorpora con 23 años en mayo de 1976, en una transición de apenas un mes. Primero desarrolló su labor como jefe de Administración y comercial para, con el paso de los años, ser adjunto a la gerencia con José Rodríguez y luego gerente de Editorial Leoncio Rodríguez, que se constituyó en octubre de 1977. Antonio Rodríguez permanecería al frente de la gerencia de EL DÍA hasta noviembre de 2012, después de gestionar desde los cambios tecnológicos de 1990, cuando entró en marcha la nueva rotativa con la adaptación de un sistema informático de vanguardia para la autoedición, y planificar la expansión de EL DÍA con una planta de impresión que se proyectó, y hasta se levantó su estructura, en el Polígono Industrial de Güímar. Finalmente el director y propietario, José Rodríguez Ramírez, apostó por la consolidación del grupo de comunicación multimedia, diversificando la oferta informativa y sumando al periódico EL DÍA su edición digital Eldia.es (que comenzó el 11 de julio de 1999), Radio El Día (2001-29 de abril de 2019) y El Día Televisión (abril de 2005-23 de diciembre de 2014).
Desde el 8 de febrero de 2019 EL DÍA continúa como referente en Canarias de la mano de Prensa Ibérica.
