Nuevas licencias

Greenpeace cubre de negro la casa de Rishi Sunak para protestar contra la extracción de petróleo

Greenpeace sube al tejado de la casa del primer ministro británico

EPC

Lucas Font

La mansión del primer ministro británico, Rishi Sunak, ha amanecido este jueves cubierta con una enorme tela negra. Al menos media docena de activistas de Greenpeace han penetrado en la casa, situada en el condado de Yorkshire –en el norte de Inglaterra– para llevar a cabo una acción de protesta contra la concesión de un centenar de nuevas licencias para explotar yacimientos de petróleo y gas en el mar del Norte. Una decisión anunciada esta semana por el primer ministro y que ha puesto en pie de guerra a las organizaciones ecologistas y a los organismos internacionales.

Los activistas han subido al tejado de la residencia equipados con escaleras, cuerdas y cascos para desplegar las grandes telas, del mismo color que el petróleo. En una foto difundida por la organización, se puede ver a dos personas sujetando una pancarta, también negra, con una pregunta dirigida al primer ministro: "Rishi Sunak: ¿los beneficios del petróleo o nuestro futuro?". La organización ha aprovechado las vacaciones del primer ministro y su familia en Estados Unidos para llevar a cabo la acción.

Nuevas licencias

"Necesitamos desesperadamente que nuestro primer ministro sea un líder climático, no un pirómano climático", ha dicho el activista de Greenpeace Philip Evans a través de un comunicado. "Sunak está dispuesto a vender el viejo mito de que el petróleo y el gas ayudan a la gente corriente a pagar las facturas de la luz, cuando sabe perfectamente que no es cierto. Más perforaciones en el mar del Norte sólo beneficiarán a los gigantes del petróleo, que ganarán miles de millones con ello, en parte gracias a un enorme agujero tributario", ha añadido. 

El Ejecutivo ha asegurado que la concesión de nuevas licencias no supondrá un retroceso en los objetivos de neutralidad climática propuestos para 2050 gracias a la inversión de 20.000 millones de libras (más de 23.000 millones de euros) en la construcción de plantas de captación de carbono. El primer ministro ha insistido, además, en que la explotación de petróleo y gas mejorará la seguridad energética del Reino Unido y ayudará a la creación de mies de puestos de trabajo. "No nos disculpamos por adoptar el enfoque correcto para garantizar nuestra seguridad energética, utilizando los recursos que tenemos aquí en casa para que nunca dependamos de agresores como [Vladímir] Putin para nuestra energía", ha explicado este jueves un portavoz del Gobierno, que ha confirmado que la policía está investigando lo ocurrido. 

Las organizaciones ecologistas sostienen que con la explotación de petróleo y gas en el mar del Norte contribuirá al aumento de la temperatura media del planeta por encima de los límites fijados por la ONU, y niegan que la extracción de combustibles fósiles en el país contribuya a reducir el precio doméstico de la energía, ya que cerca del 80% de la producción de petróleo actual se destina a la exportación.