Los sistemas electorales se basan en fórmulas cuyo objetivo es traducir el voto en escaños. España utiliza el conocido como Ley D'Hondt, un método de cálculo proporcional al que erróneamente se le califica de ley relativamente sencillo. Sin embargo, en Estados Unidos se utiliza otro conocido como 'winner takes all', cuya traducción viene a decir que el ganador se lo lleva todo.

Eso sí, ambos países coinciden en que su sistema es de elección indirecta del presidente, ya que en el caso americano es designado por el Colegio Electoral y, en España, es nombrado por los diputados del Congreso (que son elegidos por los ciudadanos).

Estas son las diferencias entre un sistema y otro:

¿Cómo funciona en EEUU?

En Estados Unidos se utiliza el sistema mayoritario o 'winner takes all', que quiere decir que si Biden ganara por un único voto de diferencia a Trump en Florida, los 29 votos de compromisarios que corresponden a este estado serían todos para el demócrata. Con esto, puede suceder que el presidente electo no haya sido el más votado en todo el país. De hecho, en 2016, Hillary Clinton ganó en sufragios, pero no fue elegida presidenta.

El estado que más compromisarios tiene es California y los que menos Vermont, Delaware, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Alaska y el Distrito de Columbia. Las únicas excepciones son Maine y Nebraska, que reparten sus compromisarios (cuatro y cinco, respectivamente), de forma proporcional en función del voto popular.

¿Cómo funciona en España?

España, por otro lado, utiliza la Ley d'Hondt, un método ideado en el siglo XIX por el jurista y matemático belga Victor d'Hondt y que se utiliza en otros países como Francia, Finlandia, Argentina, Chile, Colombia o Ecuador.

Funciona de la siguiente manera: por 1, 2, 3, 4 y 5, es decir, los cargos electos que se disputan en cada circunscripción. De todos los resultados obtenidos, los cinco diputados se asignan a las cinco cifras más altas, independientemente del partido que sean. Eso sí, para poder aspirar a obtener representación, hay que lograr un mínimo del 3% del total de los votos.