Expertos del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (CENIEH) compararán los restos hallados en los yacimientos ingleses de Pakefield y Happisburgh con los localizados en los yacimientos de Atapuerca (Burgos), declarados Patrimonio de la Humanidad.

El director del CENIEH, José María Bermúdez de Castro, ha explicado hoy a los periodistas que en algunos momentos de la prehistoria la actual Gran Bretaña tuvo seguramente un clima "casi Mediterráneo", lo que podría haber propiciado la expansión de los homínidos en esas "latitudes del norte".

En los estudios participan también expertos del Institute of Archaeology de la University College of London, el Department of Prehistory and Europe del British Museum y el Department of Palaeontology de The Natural History Museum, todos ellos de Londres, y el instituto catalán IPHES.

El proyecto de investigación se propone analizar el primer poblamiento de Europa occidental a partir del estudio de los instrumentos líticos recuperados en una selección de yacimientos arqueológicos de las islas Británicas y de la península ibérica.

Con la comparación del registro lítico de los conjuntos elegidos, se intentará evaluar si el primer poblamiento del continente muestra o no una homogeneidad tecnológica, si se observan patrones temporales similares, y si se pueden distinguir líneas evolutivas diferentes en el comportamientos de los homínidos durante el primer medio millón de años de presencia humana en Europa.

La investigación incluye un estudio conjunto con los miembros ingleses de las colecciones de los yacimientos elegidos de la Península ibérica y de las Islas Británicas.

Los dos yacimientos ingleses incluidos en el estudio son de hace unos 800.000 años, una cronología similar a la registrada en el de Gran Dolina, perteneciente a Atapuerca, donde se descubrió por primera vez el Homo Antecessor.