El vertido de crudo que contamina buena parte de las aguas del golfo de México puede costar a Florida unos 10.000 millones de dólares y la pérdida de 195.000 empleos si finalmente la marea negra baña las costas de ese estado de EEUU.

Estas cifras fueron dadas a conocer el miércoles por expertos de la Universidad Central de Florida (UCF), que partieron de la base de la pérdida de la mitad de los ingresos por turismo y empleos vinculados a este sector en los 23 condados costeros al oeste del estado.

Según Sean Snaith, director del Instituto para la Competitividad Económica de la UCF, resulta razonable esa medición en el eventual caso de la llegada masiva de vertido a las costas.

No obstante, el economista reconoció que es difícil cuantificar las pérdidas económicas que podría acarrear el impacto a gran escala de la marea negra de petróleo.

Agregó que, incluso si el turismo sólo cae en esos condados un 10%, las pérdidas de puestos de trabajo se situarían en 39.000 y el coste superaría los 2.000 millones de dólares. Snaith alertó sobre el efecto de ese posible escenario en un estado con un índice de desempleo del 12% y una situación de recesión que se vería agravada por la marea negra.