El Ayuntamiento de Santa Cruz tiene una hoja de ruta para el futuro del Rastro y el primer paso ha sido la publicación ayer en el BOP de la aprobación definitiva de la Ordenanza que regulará el ejercicio de la venta, además la ubicación de los puestos destinados a ella.

El concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, señaló que "ahora se publicarán los planes de seguridad y emergencia, así como el replanteo sobre plano de los 631 puestos previstos".

Aquellos que deseen optar a un espacio deberán presentar luego una solicitud en 15 días. Arteaga espera que "este mismo mes tengamos la distribución definitiva". Tendrán preferencia los ocupantes actuales de un puesto en el Rastro. Respecto a las 70 plazas extras para personas necesitadas, el edil dijo: "Lo primero es la diagnosis para saber las necesidades y la manera de cubrirlas".

Arteaga rechazó las acusaciones de la oposición de un supuesto beneficio para colectivos o personas afines a Coalición Canaria: "Creo que debemos felicitarnos de tener una regulación del Rastro. Eso es lo más importante".

En la Ordenanza, además de establecer el domingo y los festivos que se acuerden para la apertura y el entorno de La Recova como escenario, aparece una pormenorizada relación de derechos y deberes. Por ejemplo, la prohibición de vender animales o usar megáfonos y altavoces, así como delimitar las dimensiones de los espacios acotados o una altura máxima de 2,5 metros por puesto. Además se establecen las figuras del titular y del auxiliar de puesto que puede ocupar su lugar. Las infracciones van de leves a muy graves y de 750 a 3.000 euros, además de la posible revocación de la autorización para la actividad. La Corporación, que reconoce a las asociaciones de comerciantes, se reserva la potestad de crear la llamada Mesa del Rastro.