El Gobierno sostiene que, a cuatro años de las próximas elecciones municipales, "ahora es el momento" de plantear la reforma electoral en el ámbito local, mientras que el PSOE es partidario de un "debate en profundidad hablando de todos los temas después de las elecciones generales".

El resto de grupos de la oposición en el Congreso critican que el PP vaya a presentar esta semana en el Parlamento su propuesta de reforma electoral local, a excepción de CDC -que ha apoyado especialmente la segunda vuelta-, mientras que el portavoz popular Rafael Hernando ha garantizado que no impondrá su mayoría absoluta.

La posición del Gobierno la expresó ayer la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, que dijo que este es un "buen momento" para plantear este asunto y defendió la pertinencia de la propuesta del PP de establecer en las municipales una prima mayoritaria en el caso de que se consiga un porcentaje de votos superior al 35 % y, si no, una segunda vuelta.

Con los resultados de las municipales del 24 de mayo en la mano, el sistema de elección de alcaldes que propugna el PP hubiera abocado a 30 capitales a votar en segunda vuelta, entre ellas Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Zaragoza, pues en ninguna de ellas ningún partido se hizo con el 35% de los votos.

En una entrevista en Cuatro, la vicepresidenta rechazó que el PP pretenda así lograr lo que no consigue en las urnas al afirmar que "si hubiera sido así, se hubiera planteado antes de las elecciones" y defendió la propuesta en aras de la "estabilidad".

Los socialistas insisten en que no les parece el momento oportuno de debatirla. Su portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, se mostró dispuesto a abordar una reforma electoral "en profundidad" después de esos comicios.