El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, avisó hoy de que el PSOE no está "depre", sino "con toda la fuerza y con todas las ganas", a la vez que agradeció el apoyo, la "unidad" y la "solidaridad" del grupo parlamentario socialista.

En su intervención en el acto de homenaje a Pablo Iglesias organizado por el PSOE en el Congreso, desveló además que, al día siguiente de anunciar en el Congreso un recorte de gastos de 15.000 millones de euros en 2010 y 2011, el ex presidente Felipe González le envió un mensaje de móvil apoyándole, lo que según el jefe del Ejecutivo es "la comunicación más cariñosa" que le ha remitido desde que se conocen.

"Hoy más que nunca tienes todo mi apoyo, gobernar es esto, tomar decisiones difíciles y duras", decía el SMS, según el relato que hizo el jefe del Ejecutivo reconociendo que rompía su propia costumbre de no relatar comunicaciones privadas.

Durante el acto, fue González quien pidió al PSOE que no caiga en "la ''depre''" y le recordó que históricamente el partido y España han vivido momentos peores. En su turno de palabra, Zapatero replicó: "Por cierto Felipe, de ''depre'' nada, no estamos nada deprimidos los socialistas, estamos con toda la fuerza y con todas las ganas". "Vamos a seguir ejerciendo con toda responsabilidad, para superar la crisis y para cambiar las cosas que hay que cambiar", añadió.

Zapatero recordó a su grupo parlamentario que la "lealtad" y "unidad" no son sólo una "huella" que el PSOE debería dejar "a los que vengan en el futuro a ocupar las máximas responsabilidades", sino que serán algo "fundamental" para afrontar la tarea que tienen en frente los socialistas, para la "estabilidad" no sólo del Gobierno, sino "del país".

¿APOYARÁ CiU EL PRESUPUESTO?

Y en este punto, se refirió en concreto a la negociación de los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2011 y dijo no estar "seguro" de que el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, vaya a cumplir su amenaza de no apoyarlos. "Yo no estaría tan seguro de lo que van a hacer en el Presupuesto, por eso creo que hay que dejar que llegue su momento", afirmó.

González, que pocos minutos antes había criticado a Duran por rechazar las cuentas públicas antes de conocerlas, dejó claro que compartía la opinión de Zapatero. "Ni yo", se le oyó decir cuando el presidente dijo no estar seguro de lo que harán los nacionalistas catalanes.

EL RECORTE, IMPRESCINDIBLE

Zapatero aprovechó su intervención ante más de 400 parlamentarios y ex parlamentarios socialistas para defender que el recorte de gasto es "imprescindible", incluso "el requisito" para poder "seguir perfeccionando el Estado del bienestar". De hecho, incidió en que el PSOE es "el partido de las políticas sociales y de las conquistas sociales" y dijo que le produce "sonrojo" escuchar a los dirigentes del PP que estos días se proclaman como representantes del partido de los trabajadores.

Así, llamó a los socialistas a defender las ideas socialdemócratas y el Estado del bienestar europeo porque, a su juicio, lo que está siendo atacado no es el euro --eso "es una manifestación coyuntural", dijo-- sino el modelo europeo, el "único del mundo" que ha compatibilizado riqueza y protección social.

En este sentido, recalcó que el Estado del bienestar europeo está permanentemente cuestionado por los que dicen que no podrá competir con los mercados emergentes como India, China o Brasil, pero advirtió de que éstos países son sólo "muy embrionarios" en Estado del bienestar y que en algún momento sus ciudadanos también demandarán mayores derechos sociales.

Zapatero advirtió además de que uno de los riesgos de esta crisis es que los ciudadanos de la zona euro terminen por ver como "una carga la moneda común" y que se queden con la "imagen injusta" de que el norte está teniendo que poner recursos para apoyar los "riesgos" del sur.

Por otro lado, explicó que en la percepción del riesgo de solvencia de los países de la zona euro influye la percepción de riesgo económico con la de "riesgo político" porque en la UE "las decisiones tardan" y no hay una autoridad que respalde al euro y porque "una moneda única exige una política fiscal y presupuestaria coordinada y una política de competitividad equilibrada".

NO DAÑAR LA IMAGEN DE ESPAÑA

Y en el plano doméstico, subrayó que también las fuerzas políticas tienen que contribuir a generar confianza, así que confió en que los ''populares'' "cambien de actitud", no propaguen una imagen "injustamente tratada" de España en su intento de "dañar" al Gobierno y que dejen de "intentar cuanto antes provocar un cambio político". "Normalmente eso no funciona, lo que funciona es pensar primero en tu país y luego en los intereses partidistas".

En su intervención, el jefe del Ejecutivo dedicó tiempo a hablar de la reestructuración de las cajas de ahorros, de la futura reforma laboral y de la necesidad de reformar también las pensiones, y aprovechó para pedir al PP que deje de "criminalizar" a los sindicatos y de reclamar que se supriman las subvenciones. Y acusó además al PP de tener "alergia" al gasto público que ha permitido extender la educación y la sanidad.

Zapatero, que dijo sentir "orgullo" y "alegría" de estar entre los socialistas --y mencionó especialmente a González y al portavoz parlamentario José Antonio Alonso-- dedicó un recuerdo especial a los parlamentarios muertos en la Guerra Civil --"en las etapas más oscuras de nuestra vida política"-- y a los asesinados por ETA Ernest Lluch y Enrique Casas.