La Policía búlgara inició hoy una operación especial contra la inmigración ilegal en todo el territorio durante la que se ha detenido ya a unos 50 extranjeros indocumentados.
"Los detenidos no llevan documentos de identidad y evidentemente no son de procedencia búlgara. El siguiente paso es establecer si han cruzado la frontera de forma ilegal o si ya han pedido asilo", comentó el secretario general del Ministerio, Georgui Kostov, a la agencia Focus.
La operación se llevo a cabo en once regiones del país y en ella participaron unos 1.400 policías.
Las autoridades no han revelado la posible nacionalidad de los detenidos o si se trata de refugiados.
"Es una operación en el marco de nuestros esfuerzos contra la presión migratoria", comentó la ministra del Interior, Rumyana Bachvarova, a la emisora estatal BNT.
En la región de la ciudad de Burgas, cerca de la frontera con Turquía, se han establecido puntos de control en las carreteras en los que se inspeccionan los vehículos para localizar a inmigrantes que viajen ocultos.
Un total de 4.202 personas han pedio asilo en Bulgaria desde principio de año, informaron fuentes de la Agencia Estatal de Refugiados.
Bulgaria construye una alambrada de 160 kilómetros a lo largo de la frontera con Turquía para impedir la entrada ilegal de refugiados, de la que hasta ahora ha completado unos 70 kilómetros.
El Gobierno búlgaro teme que el cierre de la ruta balcánica de inmigrantes de Oriente Medio hacia Europa Central desvíe al flujo migratorio a través de su territorio y por ello ha acelerado la construcción de la valla.
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