El Gobierno filipino elevó a 2.344 las víctimas mortales por el paso del tifón "Yolanda" por el centro del país el viernes pasado, mientras que cifró en 3.804 los heridos y en 79 los desaparecidos. Por otra parte, reconoció que se han producido algunos saqueos, pero dijo que la situación de seguridad en Tacloban está bajo control.
En su último informe, el Centro Nacional para la Gestión y la Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC), especificó que del total de víctimas contabilizadas ayer, 2.161 se registraron en la región de Bisayas Orientales, donde se encuentran las provincias de Leyte y Samar.
Por otra parte, el ministro de Defensa, Voltaire Gazmin, de quien depende el NDRRMC, aseguró que las fuerzas de seguridad tienen "pleno control" del problema de seguridad en la ciudad de Tacloban, capital de la provincia de Leyte y una de las más afectadas, después de que se informaran de casos de saqueo.
"Había un creciente saqueo en Tacloban. Desde ayer, ya no hay", declaró Gazmin, citado por la cadena GMA. "Tenemos pleno control del problema de seguridad en Tacloban", aseguró, precisando que se han enviado 1.200 soldados y 800 policías a la ciudad para restablecer la ley y el orden.
Sus declaraciones contrastan con las realizadas por un portavoz de la Presidencia, que confirmó que ha habido saqueos tanto en Tacloban como en otras de las localidades afectadas, si bien negó que sean obra de un grupo organizado.
Ricky Carandang, de la Oficina de Desarrollo de las Comunicaciones y Planificación Estratégica, confirmó que personas desesperadas han saqueado algunos negocios en Tacloban, pero este tipo de incidentes han disminuido en todo el país.
Por otra parte, al menos ocho personas han fallecido aplastados a primera hora de este miércoles en la localidad filipina de Alangalang después de que miles de supervivientes del paso del supertifón "Yolanda" irrumpieran en un almacén gubernamental de arroz para conseguir comida, según informó a primera hora de ayer el diario británico The Guardian.
La Autoridad Nacional de Alimentación del país ha indicado que los policías y soldados apostados en el almacén no pudieron evitar que el almacén, ubicado en la provincia de Leyte, una de las más afectadas por el supertifón, fuera saqueado.
El Gobierno filipino reconoció ayer que todavía no ha llegado ayuda a todas las zonas que fueron afectadas por el paso del supertifón "Yolanda" por el centro del país.