El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha cifrado este martes en cerca de 145.000 los refugiados en los países vecinos y en unos 200.000 los desplazados por el conflicto en el norte de Malí. La aviación francesa ha proseguido con los bombardeos contra las posiciones de los grupos islamistas y se ha centrado en la ciudad de Diabaly.

ACNUR, la agencia de la ONU dedicada a los refugiados, ha indicado que los enfrentamientos durante el fin de semana entre el Ejército de Malí, que cuenta con el respaldo de tropas francesas, y los grupos islamistas en el norte y el centro del país han provocado nuevos desplazamientos de población, tanto interna como hacia los países vecinos.

Así, ACNUR tiene actualmente registrados 144.500 malí en los países de la región: unos 54.100 en Mauritania, 50.000 en Níger, 38.800 en Burkina Faso, y 1.500 en Argelia, si bien también hay algunos en Togo y Guinea. Por otra parte, cerca de 200.000 personas han huido de sus hogares en el norte y han buscado refugio en otras ciudades como Bamako, Segou, Kayes, Koulikoro, Sikasso y Mopti.

Los equipos de ACNUR recibieron la llegada de 450 refugiados al oeste de Níger el viernes y el sábado. "Los refugiados explican que han huido de la creciente intervención militar, la falta de oportunidades de subsistencia y servicios básicos y la imposición de la ''sharia''", ha explicado el portavoz de la agencia, Adrian Edwards, en un comunicado.

Otros 309 malíes llegaron a los campamentos de refugiados en el norte y el noreste de Burkina Faso, mientras que 471 llegaron al centro de recepción de Fassala, en Mauritania, desde donde está previsto su traslado hasta el campamento de Mbera, que ya cobija a unos 54.000 refugiados malíes desplazados en 2012.

Según el portavoz de ACNUR, los datos de los desplazamientos internos son más confusos. De acuerdo con la Comisión sobre los Movimientos de Población en Malí, hasta Bamako llegaron entre el 10 y el 13 de enero unas 650 personas. En la capital se estima que hay ya unos 46.000 desplazados internos, muchos de los cuales tienen problemas para subsistir.

Entretanto, en Konna, una de las ciudades tomadas por los islamistas y recuperada posteriormente por las fuerzas gubernamentales, unas 5.000 personas, la mitad de su población, han huido al otro lado del río Níger y se han alojado con los residentes de la zona.

Así las cosas, "ACNUR ha actualizado su plan de contingencia en caso de que se produzcan nuevos flujos a los países vecinos y nuevos desplazamientos en Malí, y estamos preparados para responder con asistencia necesaria", ha asegurado Edwards.

No obstante, la agencia de la ONU ha subrayado que solo ha recibido el 63 por ciento (77,4 millones de dólares, unos 58 millones de euros) de los 123 millones de dólares que había solicitado para sus operaciones de asistencia a los refugiados y desplazados malíes.

La ONG Acción contra el Hambre también ha expresado su preocupación por la situación del país africano. Según el director de la organización, Vicent Stehli, "esta nueva crisis que sufre el país es un factor agravante que viene a sumarse a la fragilidad de la población". La nueva fase "nos hacen temer el peor de los escenarios para la primavera, el periodo de entre cosechas en el que la gente ha acabado con sus reservas de alimentos", ha comentado.

Acción contra el Hambre ha explicado que ha tenido que suspender sus actividades de protección a los desnutridos en la región de Gao, en el norte de Malí, debido a los combates, y ha señalado que la situación se agravará en los próximos días para los refugiados, que ya son 150.000, y los desplazados.

FRANCIA CONTINÚA BOMBARDEANDO LAS POSICIONES ISLAMISTAS

La aviación francesa ha proseguido este martes, por quinto día consecutivo, sus bombardeos contra las posiciones de los rebeldes islamistas que avanzan hacia Bamako y se ha centrado especialmente en la localidad de Diabaly, tomada ayer por los insurgentes.

Según la emisora RFI, los bombardeos franceses de los últimos días han provocado pérdidas humanas pero también daños materiales considerables, en especial arsenales de armas, campamentos entrenamiento y bases de los yihadistas.

Durante la madrugada, han llegado a Bamako blindados del Ejército francés que participan en la vecina Costa de Marfil en la ''Operación Unicornio'' con el objetivo de participar en la ofensiva contra los insurgentes islamistas, informa la agencia africana APA, que cita fuentes militares.

El presidente francés, François Hollande, ha informado desde Abu Dhabi, donde se encuentra de visita oficial, de que Francia tiene ya 750 militares desplegados en Malí y esta cifra "va a aumentar". Fuentes del Ministerio de Defensa galo hablan de hasta 2.500 efectivos.

Después, "lo más rápido posible", las tropas francesas "dejarán el lugar a las africanas", ha precisado, en referencia a la misión avalada por el Consejo de Seguridad de la ONU y que estaría compuesta por 3.300 efectivos africanos, principalmente de los países de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO).

"Serán ellos los que lleven hasta el final la reconquista del norte" de Malí, ha subrayado, apuntando que la llegada de las tropas africanas a Malí podría tardar "una buena semana".

Por su parte, el ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, ha aclarado este martes que el Ejército malí todavía no ha recuperado el control de la ciudad de Konna, cuya caída en manos islamistas desencadenó la intervención militar de Francia.

Las palabras de Le Drian contradicen la versión dada el pasado viernes por el Gobierno de Malí, que dio por recuperada la ciudad apenas un día después de haberla perdido.