El ICL Manresa visita una de las pistas más complicadas de la competición, cargado de lesionados, y llegan a Vitoria con solo un partido ganado en cinco jornadas y casi sin bases.

Lluís Costa aún no está recuperado y su sustituto, Brion Rush, se lesionó en el entrenamiento del jueves. Tiene una rotura parcial del tendón del abductor de la pierna derecha y mañana no podrá estar operativo.

Además, Cvetkovic también ha tenido problemas en la rodilla y casi no se ha entrenado durante la semana. También llegan tocados los pívots Cakarun y Andric, mientras que Román Montañez ha sufrido un virus estomacal.

El técnico del equipo catalán, Ibon Navarro, cuenta para el viaje con los vinculados David Jofresa y Guillem Jou, y tendrá que buscar soluciones para afrontar los problemas físicos. También necesitará creatividad para encontrar la manera de frenar al Baskonia, que viene de ganar su partido de Euroliga en Belgrado.

El técnico vitoriano del Manresa ha explicado que el de mañana es "un partido de aquellos en que todo el mundo dice que no tienes nada que perder". "Es muy complicado pero también la experiencia nos dice que son los partidos que mejor jugamos". El principal objetivo del entrenador es ver si salen de Vitoria "con buenas sensaciones de cara al futuro".

La superioridad del rival vasco es muy evidente, por lo que Navarro explica que para ganar el ICL tiene que "hacer muchas cosas bien. Su juego a campo abierto, el juego abierto de sus cinco, el interior de sus cuatro, la capacidad atlética de sus exteriores, la rapidez de sus bases". "Y, delante, debemos ser capaces de jugar contra su dureza porque hay momentos en que ellos están relajados y de golpe tocan la corneta, se ponen en modo Euroliga en defensa y allí no entra nadie".