Samuel García pone punto final a su participación individual en el Campeonato de Europa Absoluto al aire libre con la séptima plaza en la espectacular final de los 400 metros lisos, en la que el palmero no pudo bajar de 46 segundos a pesar de una salida fulgurante que invitó a pensar con algo más. Con 46.35 estuvo lejos de su valor real, proyectado en el Nacional de Alcobendas (45.50) o en las eliminatorias (45.80) y la semifinal (45.58) de este Campeonato de Europa.

En una carrera eléctrica, la presencia del atleta del Tenerife CajaCanarias ya fue de por sí un éxito rotundo a sus 22 años. No quería conformarse sin embargo con ser un convidado de piedra, pero sus adversarios estuvieron a un nivel mayúsculo. Faltó el belga Jonathan Borlée pero no fallaron los dos británicos, Rooney y Hudson-Smith, oro (44.71) y plata (44.75) por debajo de 45 segundos.

La final tuvo dos actos. En el primero hubo una salida nula por parte de Hudson-Smith, que fue amonestado por los jueces. Samuel García, totalmente centrado en correr, fue el último en percatarse de tal hecho. Unos minutos después sí que el pistoletazo fue válido. El palmero dio la cara en los primeros 200 metros, dejándose ver por los primeros puestos hasta que las fuerzas le impidieron dar más, aunque el velocista del Tenerife CajaCanarias lo intentó hasta el cruzar la línea de meta.

Una vez disfrutada una histórica final para Samuel García -hacía 12 años que España no tenía una finalista en esta distancia-, con un estadio totalmente repleto, el canario focalizará su atención en dar lo mejor de sí para ayudar al equipo de 4x400 español a estar en la final de la especialidad mañana.

El salmantino Antonio Sánchez fue el primero que corrió una final europea de 400, en Stuttgart''96, donde se clasificó sexto con un tiempo de 45.41. En la siguiente edición, Split''90, el tarraconense Cayetano Cornet, todavía plusmarquista español (44.96), fue cuarto con 45.30, y en Budapest''98 Canal terminó séptimo con 45.93.