Oftalmólogos del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria (HUNSC) han incorporado a las técnicas de reconstrucción ocular la lipoestructura, un tipo de cirugía que implica inyectar grasa del propio paciente en la cavidad orbitaria.

Este es uno de los datos ofrecidos por el hospital, adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, con motivo de las V Jornadas de la Sección de Órbita y Oculoplástica del servicio de Oftalmología, un encuentro práctico para actualizar los conocimientos y técnicas de los especialistas en el tratamiento de patologías oculares.

El programa de esta edición ha contado con la colaboración de Ignacio Genol, oftalmólogo especializado en cirugía oculoplástica, con quien se ha llevado a cabo diferentes intervenciones quirúrgicas empleando la técnica denominada lipoestructura orbitaria.

Se trata de un tipo de cirugía que permite la corrección y la mejora de la funcionalidad de la región periocular al rellenar con grasa del cuerpo del propio paciente la cavidad orbitaria, mejorando así la funcionalidad de esta parte del rostro cuando ha sufrido una enfermedad o traumatismo que ha supuesto la pérdida de un ojo, por lo que previamente ha requerido la implantación de una prótesis ocular.

Si bien el uso de injertos de grasa del propio pacientes se emplea desde hace años, es relativamente novedoso este tipo de técnica quirúrgica en el entorno de los ojos y en concreto en las órbitas anoftálmicas.

Para José Luis Delgado, jefe de la sección de Órbita y Oculoplástica del servicio de Oftalmología del Hospital Universitario, incorporar este tipo de técnicas quirúrgicas innovadoras permite mejorar la calidad asistencial que se ofrece a los pacientes, pues recuperan funcionalidad en el rostro de forma natural y eso ayuda psicológicamente a los pacientes que han sufrido la pérdida de un ojo o los que, con parálisis facial, han perdido masa muscular provocando daños en la vista.

La lipoestructura orbitaria se lleva a cabo con anestesia local y sedación del paciente, en una intervención quirúrgica que dura aproximadamente entre una y dos horas, que se aplica en pacientes seleccionados siguiendo las indicaciones y criterios del especialista.