¿Cómo va a ir este país a alguna parte si se ha originado un debate sobre los huevos de uno de los leones de bronce que custodian la entrada principal del Congreso de los Diputados? Daoiz, uno de los leones (el otro se llamará Velarde, digo yo) salió de la fundación sin testículos y a alguien se le ocurrió plantear a los historiadores, y al propio Gobierno de España, la conveniencia de añadírselos, más que nada para que el león no se sintiera disminuido frente a su compañero.

Incluso una escultora se ha ofrecido a injertar la bolsa escrotal al félido para restituirle su dignidad, porque un león sin huevos es como un jardín sin flores e, indudablemente, afecta a su categoría de animal aguerrido, ágil y peligroso. Sin escroto, mmmm, el león Rodolfo.

El Gobierno ha desaconsejado la intervención, aunque nadie sabe realmente el porqué. Unos dicen que porque estas estatuas, que son bien de interés cultural, fueron fundidas con cañones capturados al moro y no es cuestión ahora de estar añadiendo otros bronces a las partes inexistentes de Daoiz. Que lo que se fundió, fundido queda. Y lo que dejó de fundirse, igual.

Pero es curioso que mientras este país convulso se debate en mil batallas, sobre todo económicas, que afectan al ciudadano de una manera tan dramática, unos cuantos mentecatos se detengan a pensar que si a uno de los leones del Congreso le falta un huevo o dos.

Ahora que empieza el verano, o al menos el mes de julio, uno de sus dos grandes meses, las noticias empiezan a diluirse y en vez de la gente pensar en si Sánchez o Madina, pues le da por hacer encajes de bolillos con los huevos inexistentes de Daoiz. Huevos que debieron fundirse con el bronce de los cañones capturados al moro, en cualquier batalla de esas, concretamente en la de Wad-Ras, en 1860, con el general O''Donnell ganando terreno a España a costa del natural de aquellas tierras.

De ahí vienen esos leones, de la batalla de Wad-Ras, así que llegan desde muy atrás, de cuando España se partía la cara en Marruecos y se daba estopa con el moro, que nos traía en jaque. Aquí aprovechamos la más mínima oportunidad para hacer historia, a cuyos profesionales también se ha consultado la oportunidad de hacer un injerto a un león de bronce, que es un símbolo para los españoles pues custodia la democracia que está dentro del edificio.

Dejemos a Daoiz como está y pensemos en si Sánchez o Madina. Aquí, en Canarias, apoyarán a Sánchez porque José Miguel Pérez prefiere a Madina. Y los socialistas de ahora acostumbran a llevarle la contraria a su jefe en estos peñascos.