El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la pena de seis años de cárcel por lesiones impuesta a un seguidor de la selección española que dejó tuerto a otro de un botellazo en Las Palmas de Gran Canaria durante la celebración de la victoria de la Roja en la Eurocopa de 2008. La Audiencia de Las Palmas consideró que, el 30 de junio de 2008, Jacob Jonás P.C. intentó arrebatar una bandera a un grupo de jóvenes que celebraba el título. El acusado no consiguió su propósito, pero regresó con un grupo de amigos y con una botella de cristal que ocultaba a su espalda. Al llegar al joven que le había impedido llevarse la bandera, le arrojó la botella directamente a la cara.