El "cumpleaños" de la Universidad de La Laguna (ULL) se ha convertido últimamente en un momento propicio para que el rector afee la conducta de los responsables de la Consejería de Educación por sus incumplimientos con la institución, especialmente en materia presupuestaria, pero también para que exprese su opinión sobre la forma en que las administraciones públicas están afrontando la crisis económica.

Ayer, cuando la ULL celebraba sus 220 años de existencia -cumplidos el domingo-, Doménech advirtió a los representantes políticos del peligro de sucumbir a "la tentación cortoplacista de establecer la reducción del déficit como único criterio de planificación económica".

"Superar la crisis exclusivamente con la tijera a lo único que nos llevará es a quedarnos sin tela con la que protegernos de las inclemencias ambientales", alertó el rector antes de exhortar: "Pongamos en acción nuestra capacidad creativa para formular propuestas con las que tejer un nuevo traje más sostenible".

Esta insistencia en acabar con el déficit como primera y casi única prioridad está conduciendo, a juicio del máximo dirigente del centro docente, a "la frustración por la renuncia a la consecución de los ideales sociales que han nutrido la evolución de nuestra civilización hacia la calidad de vida y el desarrollo humano".

Doménech también fue exigente con los propios universitarios, a los que animó a ser "más productivos, eficientes y responsables socialmente", pero quiso valorar el buen momento por el que, a su juicio, pasa la ULL. "Tenemos la mejor universidad de nuestra historia. Sin caer en la autocomplacencia, porque efectivamente tenemos que avanzar en muchos aspectos, tenemos que reconocer que hacemos muchas cosas bien, yo diría que incluso de forma excelente", dijo.

En cuanto a los reproches a la Administración regional, aseguró que no obedecen a una "voluntad de confrontación", sino de la convicción de que ambas instituciones deben ser "leales aliados en el proyecto común de una Canarias más formada y más inteligente, creativa y próspera".

Desde esa posición, el rector exigió al Gobierno el cumplimiento del contrato-programa, el instrumento de financiación de las universidades canarias, cancelado unilateralmente por el Ejecutivo cuando restaba un año para su vencimiento. Asimismo, reiteró su petición a la Consejería para que asuma, "al menos en parte", el pago de las cantidades que el Ministerio de Educación iba a destinar al proyecto Campus de Excelencia Internacional y que el Estado también ha suprimido.

La intervención de Eduardo Doménech en el día institucional de la ULL se produjo en presencia del consejero de Educación, entre otras autoridades. El acto contó también con la presidenta de la Confederación de Rectores de Universidades Españolas, Adelaida de la Calle, quien pronunció la conferencia "Los retos de la nueva universidad".

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