La fractura del pacto regional entre CC y PP no pone en riesgo el que mantienen ambas formaciones en el Cabildo de Tenerife, aseguraron ayer tanto el presidente de la institución, Ricardo Melchior, como el portavoz de los populares, Antonio Alarcó. Sin embargo, Melchior advirtió de que si los consejeros del PP ocupan un puesto en el gobierno insular "es para trabajar por la Isla y no para su partido o su campaña". El presidente del Cabildo acusó al PP regional de estar embarcado en "una campaña electoral agresiva" en lugar de trabajar para el Gobierno canario "en un momento delicado, tan duro y crítico". Aunque no dijo que sus socios en la corporación mantengan la misma actitud, sí quiso lanzar una contundente advertencia: "eso no lo permito ni antes ni ahora".

Por su parte, Antonio Alarcó defendió la idea de que nada tiene que ver el pacto regional con el insular. En este sentido, aclaró que "ese es el gobierno de la región y no el de Tenerife. El de aquí es un pacto estable que no tiene ninguna incidencia derivada de los acontecimientos que han ocurrido y que le dan un valor añadido a la tranquilidad de esta institución", explicó.

"Hay tres islas gobernadas con pacto -Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura-, e independientemente del que existía en la Comunidad Autónoma, son estables y están funcionando correctamente", apostilló.

Uno de los municipios tinerfeños donde también rige el acuerdo CC-PP es el Puerto de la Cruz. Guillermo Meca, presidente local de los populares, descartó ayer cualquier posibilidad de ruptura: "Ahora mismo no nos planteamos nada de eso. Tampoco creemos que ese desacuerdo regional afecte en nada al Puerto de la Cruz. Nuestra prioridad es seguir trabajando juntos por la ciudad, ya que tenemos muchos proyectos en marcha", dijo.