El Consejo de Ministros destinará 4.320 millones de euros hasta el 2025 para el despliegue de las nuevas infraestructuras de telecomunicaciones. El Ejecutivo aprobó ayer el plan de conectividad que prevé extender la banda ancha de alta velocidad al 100% de la población y el programa de impulso de la nueva generación de telefonía móvil, conocida como 5G.

Así lo avanzó la ministra portavoz, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al encuentro entre los ministros en la que aseguró que 883 millones de esos 4.300 millones están incluidos en los Presupuestos para el 2021. El Ejecutivo prevé que esta política “tractora” movilice una inversión privada de 24.000 millones de euros.

Alrededor de 2.320 millones de euros –583 millones proceden de los Presupuestos de 2021– serán destinados al denominado ‘Plan para la conectividad y las infraestructuras digitales de la sociedad, la economía y los territorios’, que tiene como eje principal la extensión de banda ancha de alta velocidad (100 megabits por segundo) a toda a población. En la actualidad, esta velocidad es accesible al 84% de la población, mientras dentro de un año se alcanzará el 91%, según el Ejecutivo.

El plan también prevé reforzar la conectividad empresarial con el objetivo de alcanzar que el 100% de los polígonos industriales tengan una “conexión escalable” a un gigabit por segundo en el 2025, así como facilitar bonos de conectividad digital para las pequeñas y medianas empresas que participen en programas públicos de impulso a su digitalización.

También, mejorar la conectividad de las infraestructuras digitales transfronterizas y el impulso a la participación en programas europeos de interés común (Ipcei) son otros de los ejes.

Además de la reforma normativa y sistemas de Información pública (que incluye la aprobación de la nueva ley general de telecomunicaciones), y la renovación de infraestructuras de telecomunicaciones en edificios, incluyendo medidas de apoyo a la eficiencia energética.