Canarias es la comunidad autónoma con menor proporción de personas por debajo del umbral de la pobreza que se benefician de rentas mínimas de inserción, con un 1,5 % que es casi inferior en seis puntos y medio a la del conjunto de España, del 7,97 %.

Ello aun cuando el Archipiélago es la quinta región con mayor tasa de población en riesgo de pobreza, un 22,7 %. Un cifra que rebasa en cuatro puntos la media estatal del 18,6 %. En las Islas están en situación de pobreza 488.819 habitantes, pero solo 7.344 perciben alguna ayuda de ese tipo, detalla en un comunicado la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales del país.

Esta organización subraya en el informe publicado ayer las "diferencias extremas" que se dan entre comunidades autónomas en materia de distribución de rentas de inserción, que llegan a beneficiar hasta al 70 % y al 63 % de la población por debajo del umbral de la pobreza en las que presentan los mejores datos -País Vasco y Navarra, respectivamente- mientras que no alcanzan ni al 10 % en nueve regiones del país, de las que Canarias está a la cola.

Las cifras de directoras y gerentes de Servicios Sociales ponen de manifiesto, además, que el montante de los gastos de cada perceptor de una de esas ayudas asciende a 3.663 euros anuales, frente a los 29.254 euros de renta media por hogar que se dan en las Islas, llegando solo al 12,52 % de esta última cantidad. Con lo que se sitúa casi 5 puntos por debajo del 17,10 % que alcanza España en conjunto, y eso que esta es ya "una cuantía extremadamente baja", a juicio de la organización profesional.

Por todo lo expuesto, la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales demanda que los demandantes de rentas mínimas de las comunidades "se integren de manera automática en el ingreso mínimo vital", a fin de auxiliar a un millón de solicitantes de esta nueva ayuda que a lo largo de España "se encuentran atrapados en el laberinto burocrático" que, a su juicio, se ha establecido como vía de acceso a la misma.