Los directivos de banca especializados en el negocio de los planes privados de pensiones suelen comentar que una de las dificultades que encuentran para comercializar tales productos es que el sistema público supone, por sus rendimientos para la persona que se jubila, una competencia extraordinariamente difícil de batir. Lo viene a certificar un informe divulgado ayer por el Banco de España cuyos autores llegan a la siguiente conclusión: como media, un jubilado español recibe 1,74 euros por cada euro que cotizó durante la vida laboral. Dicho en otros términos: la suma de las pensiones que se perciben durante los años del retiro es un 74% superior al conjunto de las cotizaciones abonadas.

El referido informe lo firman los economistas María Moraga y Roberto Ramos. Se trata de una estimación del rendimiento financiero del sistema de pensiones, una de las formas posibles de retratar el grado de generosidad de las prestaciones públicas. Es además un documento que formará parte de la argumentación técnica que el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, expondrá en la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo cuando los grupos políticos entren en la discusión de la próxima reforma de las pensiones.

Moraga y Ramos hacen el siguiente ejercicio: a partir de una muestra de 7.627 personas que se jubilaron durante el año 2017, se compara el volumen de cotizaciones aportadas en activo -por los trabajadores y por sus empresas- con estimaciones del total de pensiones que cobrarán durante el retiro, considerando que se actualicen según el índice de precios al consumo (criterio que ha prevalecido desde los años 90, aunque estuvo suspendido durante la crisis anterior y a raíz de la reforma de 2013) y niveles de esperanza de vida basados en datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). A partir de ese material, los investigadores concluyen que la rentabilidad de los planes privados de jubilación y de muchos de los productos financieros está muy por debajo del sistema público y que no hay que tomarse a la ligera la decisión de cuándo jubilarse :

E Tasa

La técnicamente llamada tasa interna de retorno (TIR) es una de las formas de medir la rentabilidad del sistema para los jubilados que se salda con resultados como estos: el rendimiento anual equivale como media al 3,5%, con una horquilla que desde el 2,80% para el caso de las jubilaciones anticipadas al 4,11% de las que se producen con la edad legal ordinaria. Esta última tasa supera el 3,69% que, estiman los expertos del Banco de España, obtienen quienes demoran voluntariamente la edad del retiro, balance que muestra que los incentivos para prolongar la vida activa son "escasos". La rentabilidad media anual del 3,5% sobresale singularmente si es comparada con las de algunos productos financieros: el interés nominal de los depósitos bancarios a plazo fijo a más de dos años es del 0,54%; el de los bonos soberanos españoles a diez años es inferior al 0,4%; el rendimiento medio de los planes privados de pensiones a veinte años es del 1,4%, y la rentabilidad media de los fondos de inversión a ese mismo plazo está es inferior al 1,3%, según datos de la patronal Inverco. En todos esos casos se trata de tasas de interés nominales y por tanto sin recoger el impacto de la inflación, que desgasta los réditos reales.

E El indicador CPU

El informe hace otra aproximación a la rentabilidad que obtienen los jubilados a través del denominado coste de pensión unitaria (CPU), que compara las cantidades satisfechas en cotizaciones y la suma estimada de las pensiones que se recibirán. Para ajustar los resultados se tiene en cuenta un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 1,3% anual. Los datos que ha publicitado el Banco de España son estos: de media, un jubilado recibe en pensiones en torno a 1,7 euros por cada euro aportado en cotizaciones durante la vida laboral; según la modalidad del retiro, la cantidad varía entre los dos euros de quien se jubila a la edad ordinaria y los 1,38 de aquellos que lo hacen de manera anticipada, y la rentabilidad es significativamente alta (1,89 euros por euro cotizado) para los pensionistas que proceden de la jubilación parcial, forma de retiro anticipado conforme a la cual la persona compagina durante un tiempo el trabajo (a tiempo parcial) y el cobro de la pensión.

La prestación media de los nuevos jubilados fue en Canarias de unos 1.063 euros al mes en 2019, aunque con relevantes diferencias según los regímenes de cotización: los jubilados del régimen general (asalariados) se retiraron como promedio con 968 euros al mes de pensión y los autónomos (empleados por cuenta propia), con poco más de 700.