La consejera de Economía, Conocimiento y Empleo del Gobierno de Canarias, Elena Máñez, ha dicho este martes que, aunque la incertidumbre persiste y todas las previsiones hay que tomarlas con cautela, las primeras semanas de Gobierno de CanariasElena Máñezdesconfinamiento

Así, de un decrecimiento de la economía canaria para 2020 de hasta un 30 % del PIB que auguraban algunas previsiones por el efecto de la crisis sanitaria del coronavirus, ahora se piensa más en una caída del 15 %, aún muy importante y por encima de la media nacional debido a la "especialización" de la economía del archipiélago en el turismo.

Máñez se ha pronunciado así durante el acto de presentación del libro "2019 La economía canaria en gráficos", realizado por la CEOE de Tenerife, cuyo presidente, José Carlos Francisco, ha subrayado que el único sector que tiene capacidad para generar empleo en el corto plazo es la construcción, que a su vez está pendiente de la agilización de las licitaciones de la obra pública.

La consejera ha adelantado que el Gobierno está estudiando y aprobará en breve mecanismos que permitan agilizar las inversiones y la obra pública, un reto para las administraciones en este momento.

Ha considerado que en el aspecto turístico Canarias puede posicionarse mejor que otros destinos si mantiene el trabajo en "la línea correcta", es decir, garantizar la máxima seguridad sanitaria posible a los visitantes, con la aplicación de protocolos estrictos en coordinación con la Unión Europea que permitan realizar pruebas de covid-19 antes de volar y la "trazabilidad" de los turistas.

La consejera ha señalado que la aplicación generalizada de los ERTE y las líneas de liquidez a las empresas han permitido crear "un colchón" y evitar la pérdida masiva de empleos y tejido productivo.

Ahora, confía en que los ERTE en el turismo y en otros sectores especialmente afectados por la crisis puedan prorrogarse, una posición en la que es "unánime" toda la sociedad canaria y que debe adoptarse dentro del diálogo social en el Estado.

El presidente de la patronal tinerfeña, José Carlos Francisco, ha coincidido en que la apertura de las fronteras a partir de julio es una condición necesaria pero no suficiente para la recuperación, que auguró lenta y progresiva.

Para Francisco, al margen de la coyuntura de la crisis sanitaria, la economía canaria arrastra un problema estructural desde principios de este siglo, que es el descenso ininterrumpido del PIB per cápita en las islas en comparación con el nacional desde 1999.

Entonces, el PIB por habitante en Canarias estaba en el 99,6 % de la media nacional y el dato del pasado año que se refleja en el libro presentado este miércoles, "2019 La economía canaria en gráficos", cae hasta el 81,35 %.

Este libro, que se edita anualmente, reúne información de indicadores socioeconómicos para ayudar en la toma de decisiones por parte de los agentes económicos y las administraciones, gracias a su forma de presentación gráfica.

Aunque el libro, que incluye datos que se remontan a hace cuarenta años, abarca hasta el año precedente a su publicación, partir de esta edición se va actualizando en internet según aparecen los nuevos indicadores, en https://ceoe-tenerife.com/sisea/ .

El presidente territorial de CaixaBank, José Ramón Fuertes, que participó en la presentación del libro al ser entidad patrocinadora, ha ofrecido algunos datos recientes que pueden apuntar a que el deterioro económico podría no ser tan pronunciado como han apuntado las previsiones.

Ha señalado que hace cuatro semanas, la entidad bancaria solo registraba 50.000 operaciones mensuales con tarjeta, que ya han ascendido hasta 200.000, aún lejos de la normalidad porque el turismo sigue cerrado.

Fuertes ha dicho que ninguna de las previsiones realizadas sobre la evolución económica en 2020 tiene en cuenta las ingentes cantidades de liquidez y las ayudas que están inyectando los gobiernos a la economía

A medio plazo hay que tener en cuenta la buena incidencia que tendrá en España en general y en Canarias en particular el fondo de recuperación de la Unión Europea, cuyo efecto puede ser comparable al que tuvieron los fondos de cohesión, ha aventurado.